Es tan difícil transmitirle al cliente lo que tu producto le hará sentir antes de que lo haya comprado.
Si lo consigues la venta está hecha.
Pero eso no lo enseñan en ninguna escuela ni en ningún máster.
Hoy te cuento la historia de un anuncio que lo consiguió, sin lugar a dudas. De lo simple que es, es brillante. No deja indiferente a nadie.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
Hoy no te cuento ninguna historia, hoy te hablo de una fuente de historias. Y es que hay un lugar donde recibir todas las semanas un ejemplo práctico de cómo aplicar una historia para vender más de lo tuyo.
A veces será para un diseñador, un psicólogo, un granjero o un veterinario.
También puede que la historia le ayude a que se apunte a su newsletter, pida una cita o directamente compre.
O que la historia sea aplicable a su web, a su historia de marca o a un email.
Ejemplos variopintos que bien podrían ser reales. Libres de derechos, úsalos, adáptalos o haz con ellos lo que quieras.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Solo tienes que entrar aquí para apuntarte y no perderte ninguna de estas historias:
https://www.soysandraypunto.com
Contar chistes es todo un arte. Imitar voces, hacer pausas, el efecto sorpresa...
Al igual que en mis historias persuasivas tengo en cuenta los ritmos, las palabras elegidas, qué contar antes, que no contar...
Todo es importante para alcanzar el objetivo. Ya sea la risa o lo que necesite hacer sentir al lector para que compre: miedo, felicidad, etc.
Hoy te cuento un chiste y te lo analizo para que veas qué tener en cuenta para conseguir la ansiada carcajada... o compra.
Mira a ver si te inspira para aprender tú también.
Yo soy (¡era!) de las que contaba los chistes fatal. Hasta que me di cuenta que solo eran historias con un objetivo: hacer reír.
Como el storytelling, vaya. Que no busca la risa, sino la felicidad, el miedo o lo que sea que necesite sentir el lector para comprar.
Hoy te cuento por qué se parecen tanto y como aprender a contarlos te ayudará a vender más de lo tuyo.
Mira a ver si te inspira y te motiva lo suficiente para dominar este arte de contar historias.
¿Cuántas veces no has confirmado el apuntarte a una newsletter?
¿O has hecho la declaración de la renta la última semana?
O lo que sea que hayas dejado para el último momento.
Porque sí, si no hay último momento parece que nos falte una buena razón para hacer algo. Así de vagos somos, que le vamos a hacer.
Lo escaso crea necesidad. Lo corto deja con ganas de más. Y una fecha límite para conseguir tu producto hace que lo compren.
No es manipulación, eres tú ayudando a que no se pierdan algo que les interesa. Solo eso.
Hoy te cuento la historia de una cascada de fuego efímera y cómo ha conseguido convertirse en una atracción turística de las más deseadas. Seguro que a ti también te gustaría verla.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
¿Y tú qué haces?
Esa pregunta tan simple y a la vez tan complicada. De contestar bien, me refiero.
Porque ese “qué” debe de ser respondido con un porqué. Con una historia. Con una emoción.
Es decir, no contestar con lo que haces sino con lo que haces sentir
Hoy te cuento cómo el proyecto Ayúdame3D ha usado su impresora 3D para hacer el bien. Pero sobre todo lo bien que lo cuentan, clave para que lleguen lejos.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
A veces pecamos de querer ser perfectos. O peor, de querer parecerlo.
Todos tenemos que superar obstáculos en el camino. Y por mucho que eso te haga sentir vulnerable a veces contarlo es positivo.
Porque conectas con los demás, hace que tu empresa sea más humana. O mejor, lo parece.
Hoy te cuento cómo un hombre transformó un basurero en un parque y como no escondió todos los problemas encontrados por el camino. Hasta que consiguió el apoyo de la ciudad.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Tu web puede ser preciosa, cargar rápido, verse bien en el móvil… Pero si no es fácil de entender, te guía, y da confianza no te servirá para vender.
Y las herramientas para conseguir eso son las palabras. Más concretamente las historias.
Hoy te cuento la historia de como en los países asiáticos sueltan patos en los arrozales para mejorar la producción.
Igual que hay que escribir buenos textos en la web para mejorar las ventas.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Hemos perdido la empatía. Presumimos de nuestro mundo hiperconectado y después no conseguimos conexiones reales.
Cuando se trata de una de las mayores ventajas competitivas que existen.
Y solo se trata de saber escuchar de verdad. De pensar en el otro.
Cuando diseñas un producto, cuando envías un mensaje, cuando tomas una decisión… Piensa siempre en tu cliente
Hoy te cuento como una mujer ayudó a unos vecinos abueletes a sobrellevar mejor el confinamiento. Solo usando su empatía consiguió hacerles sentir especiales.
Tu negocio vendería más si tus clientes también se sintieran así.
Mira a ver si te inspira para conseguirlo.
Si tu cliente ideal escaseara, es fácil que pensaras en doblar esfuerzos en publicidad para ser más visible, ¿no?
Aunque otra opción sería intentar aumentar el número de clientes ideales. Pero claro, decirles que compren no parece muy efectivo.
Piensa otra manera diferente, innova.
Hoy te cuento la historia de cómo Michelín terminó inventando una guía de restaurantes para vender más neumáticos. Pensó fuera de la caja y fue todo un éxito.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
Es correcto describir las características de tu producto o servicio en tu web. Diría que es hasta importante.
Pero no es lo único.
Necesitas una estrategia más efectiva para llegar al corazón de tus clientes.
Necesitas hacerles sentir que lo necesitan.
Necesitas historias.
Historias que se les queden grabadas en la memoria.
Hoy te cuento la historia de la estrategia de Japón para combatir los futuros tsunamis. Una estrategia que une acciones de corto y largo plazo. Todo para conseguir su objetivo.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Entiendo que sabes a quien te diriges. Cual es tu cliente.
Pero… ¿sabes cuál es el problema específico que le solucionas con tu producto?
Porque ahí está la clave.
Si te equivocas y tu web se centra en otro problema (o ni siquiera eso) tu web no convertirá. No venderá. Cerrarás.
Hoy te cuento la historia de unos periodistas que creyeron que unas gallinas molestaban a los vecinos. Era verano y tampoco tenían muchas más noticias que dar así que se “inventaron” la noticia.
Que no te pase a ti lo mismo, escucha a tus clientes.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
P.D: Si hubieran escuchado a la gente otro gallo cantaría.
Tendemos a pensar que nuestra web debe de resaltar solo lo mejor de nosotros. Sin mostrar errores o carencias.
Sin embargo por el camino también perdemos la autenticidad.
No hay nadie perfecto, ir de cara puede ser de las mejores estrategias para conectar con tus clientes. Para enamorarlos.
Hoy te cuento la historia de cómo Matt Damon conoció a una madre soltera que trabajaba en un bar y se enamoró de ella. Tanto que se casaron y formaron una familia. Solo porque la mujer se mostró tal cual era. Sin filtros.
Sirve tanto para sentir amor como para tener ganas de comprar.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Ser pequeño tiene sus ventajas.
Incluso, aunque no lo seas, si eres ingenioso o ingeniosa puedes conseguir mucho más que con un gran presupuesto de marketing.
¿Te gustaría saber cómo? Te lo muestro con un ejemplo.
Hoy te cuento la historia de como Burger King consiguió una visiblidad que costaba millones por muy poco. Y encima se hizo viral, creo comunidad y aumentó su reputación.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
Sorpresa, autenticidad y emoción.
Eso es lo que tiene esta historia y lo que debería de tener y transmitir tu proyecto.
Se dice pronto pero es más difícil de conseguir de lo que parece, te lo digo yo.
Porque eso solo lo consigues con las palabras y la historias. Las adecuadas. Storytelling en estado puro.
Hoy te cuento la historia de una leyenda de la música, cómo supo transmitir su pasión y su autenticidad fuera de su entorno y tantos años después. Ella lo hizo cantando, tú lo tienes que hacer con tu web.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Saber lo que quieren tus clientes es imprescindible para que te compren y por tanto tu negocio prospere.
Pero no es tan fácil como suponerlo. Ni tan siquiera sirve preguntárselo. No, que va.
Porque ni ellos mismos lo saben.
Será tu trabajo averiguarlo.
Hoy te cuento la historia de un experimento social que se hizo antes de lanzar por primera vez el walkman y cómo supieron averiguar el verdadero deseo de sus clientes, aunque todos habían mentido.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
No hay compra si no hay confianza, eso para empezar. Pero además de confianza tu nombre debería de ir ligado a una buena reputación.
Bueno, solo si quieres vender en lo tuyo.
Una buena reputación, o marca personal como lo llaman ahora, es clave para convencer a tus clientes que eres la opción adecuada.
¿La tienes? ¿Sabes como escribir para que se perciba?
Hoy te cuento la historia de Picasso, de cómo conocía el valor de su marca y cómo era un maestro también explotándolo, además de para vender cuadros.
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
Aunque pueda sonarte triste es más importante que tu producto o servicio se perciba como profesional o de calidad que que lo sea realmente. Que no diga que no deba serla, eso por supuesto.
Pero si su percepción no está a la altura te tocará cerrar. Y las historias persuasivas pueden ayudarte mucho en eso.
Déjame que te explique cómo.
Hoy te cuento la historia de un restaurante fantasma que fue un éxito antes de tan siquiera existir. Todo por tener historias que provocaban deseo.
El poder del storytelling, vaya.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.
Cuando tu negocio lleva tiempo a la deriva y te queda poco pulmón para mantenerlo a flote la mayoría de gente cierra.
Pero hay quienes intentan una última bala. Y ese último intento puede cambiarlo todo.
¿Sabes qué es lo mejor de esto? Que no hay riesgo ninguno, porque ya está todo perdido.
Puedes intentar cualquier cosa.
Hoy te cuento la historia de un diseñador desconocido que estando a punto de arruinarse intentó una última cosa, una locura hubieran dicho muchos, y consiguió tener éxito (y todavía lo tiene).
Mira a ver si te inspira para lo tuyo.
A veces puede ser frustrante.
Me refiero a no saber comunicar todos los beneficios de tu producto/servicio.
Sobre todo a aquellos que lo necesitan de verdad. A aquellos que incluso les podría cambiar la vida.
La chica de la te hablo lo consiguió.
Fue valiente y también ingeniosa. Y ni siquiera buscaba el beneficio económico (aunque lo consiguió).
Es lo que ocurre cuando lo que haces tiene un propósito más allá de ganar dinero.
Mira a ver si te inspira para conseguir tú también lo mismo.