Todos venimos al mundo con ese sistema operativo preinstalado, solo que le hemos ido prestando más atención y medido la inteligencia y el conocimiento externo adquirido durante años...
Vacaciones no es parar, sino entretenerse a menos de que esas vacaciones sean un “Detox” como lo llaman hoy, para hacer desconexión de pantallas, de relaciones tóxicas, de comida chatarra, de crítica, de placeres y otros deseos, sexuales o no.
Cuando logramos ser conscientes de la raíz de esas cosas que nos afectan cuando nos relacionamos con otros, logramos también entender que, al igual que nosotros, los demás simplemente reaccionan a esos estímulos externos o mentales que, desde sus vivencias personales, creen que es una verdad que aplica para todos.
Es importante planificar y tener objetivos con una visión de vida, pero eso no debe de quitarnos la oportunidad de vivirla, aprendiendo que todo puede cambiar en cualquier momento, practicando la aceptación de que no puedes controlarlo todo y sobre todo el desapego a nuestras propias expectativas, ajustarlas ante cualquier eventualidad y disfrutar simplemente lo que la vida nos da cada día como aprendizaje.
¿Eres de los que practica la modestia para evadir una situación incómoda cuando te dan un halago o un cumplido?
En realidad quizás crees que tú mismo o tú misma no deberías sentir orgullo por algo que valoras de ti, porque eso es de vanidosos, petulantes, o cualquier otro adjetivo negativo que quieras.
Esa falta de fluir libremente de tu trabajo por toda esa presión detiene tu creatividad y cualquier otra posibilidad de disfrutarte el proceso de lo que haces.
Tal vez el estrés que sientes no es por el trabajo en sí, sino por el creer que no serás recompensado al final,
o Tal vez dudas de ti si te descubres RELAJADO y DISFRUTANDO del trabajo y piensas que no puede ser así, porque crees que el disfrute solo debe llegar cuando este todo completo y perfecto.
Una experiencia difícil que nos confronte, puede hacernos pensar o imaginar muchas cosas y si a eso le sumamos que no hemos trabajado lo suficiente en nosotros mismos, aparecerá la duda y las inseguridades, afectando nuestra autoimagen y por supuesto la autoestima.
Sin autoestima te saboteas tanto por no creer en ti mismo, que te esfuerzas por demostrarte que no vales y terminas en el mismo ciclo del victimismo.
Si en realidad deseas una sana autoestima, mi invitación es a que trabajes muy fuerte en recuperar primero tu amor propio, tal vez así vuelvas a conocerte y a observar todo el valor que tienes para darte y vuelvas a creer en ti solamente.
Un estudio realizado a la comunidad educativa en Salamanca, España, usando mindfulness para la gestión emocional, encontró que al entrenar su mente, las personas tenían impactos positivos como: “Mayor apertura a la experiencia emocional y aumento de la percepción emocional, tanto intrapersonal, como interpersonal; Al mismo tiempo, se encontró que quienes entrenan su mente logran una mejor regulación y asimilación de las emociones.”
Aprende a observar tus sensaciones para gestionar tus emociones.
Tal vez el primer paso que debes hacer antes de aprender a meditar, es aprender a RESPIRAR y hay muchos ejercicios que puedes realizar para empezar a tener el foco en el aire que entra y sale de tu cuerpo y de esa forma entenderás por qué sucede la relajación que tanto buscas o en algunos casos porque se activa mucho más tu mente y claro esta, tu cuerpo, por eso muchos deportistas de alto nivel entienden que lo mejor para alcanzar sus retos es respirar bien y hacerlo únicamente por la nariz.
Hay momentos en la vida en las que la pregunta de quienes somos resuena más en nuestras cabezas, ya sea porque hemos estado confundidos por mucho tiempo o porque finalmente nunca sentimos que encajábamos en algunos lugares.
Hoy quiero traerte un cuento que espero nos ayude a entender ese camino de propósito, de significado o de claridad, como lo quieras llamar y en el que quizá tú puedas estar transitando…
El cuento que hoy te traigo se llama:
EL ÁRBOL QUE NO SABÍA QUIÉN ERA.
Desconozco su autor y, te agradezco si lo conoces, me hagas saber para darle los créditos correspondientes.
Cuando uno no CREE en sí mismo, piensa que hay algo mal en cómo es y vive preocupado de que si alguien lo nota, te va a desenmascarar, así que te esfuerzas por tener una fachada o una armadura que te proteja.
Una vez reconozcas tus limitaciones, date cuenta cuantas que son solo mentales o "películas" que te creaste años atrás sobre ti y tus capacidades…
Distraernos es una forma de pensar desde una muy baja consciencia nuestra, o como comúnmente se le conoce un MINDSET, que tal vez ya esté quedándose obsoleto, pero que nuestro cerebro termina usándolo para salvarnos de ese algo tan incómodo que nos pone en una situación de emociones que no sabe como manejar.
Si no reforzamos la confianza en nosotros mismos a través de la experimentación y si no entendemos que hay cosas en las que somos buenos y en otras no tanto y que eso no nos define, viviremos con una versión muy limitada de nosotros por miedo a volver a defraudarnos por no cumplirnos las metas o sueños y esa es una visión nuestra muy inmadura sobre la vida.
Hacer más de una cosa a la vez no es SANO, aunque nos hayan vendido la idea que eso es GESTIONAR mejor tu tiempo,
Pero, por el contrario, esto puede llegar a ser un comportamiento de alguien muy disperso o que pueda sufrir en este momento de algún tipo de Déficit de atención o que en el futuro sea diagnosticado con algo parecido.
Tal vez no te des cuenta de que estás en la zona de confort, pero si evitas en tu vida todo lo que te ayuda a crecer y a mirar todo con una mente abierta y de principiante, es que ya hace rato te quedaste cómodo donde estás.
Gestionar tus emociones es lograr identificar lo que está pasando por tu mente en un instante determinado, reconocer las sensaciones que suceden en ese instante y antes de que la emoción aparezca y tome ella el control de ti, reconocerla y entender que puedes o no reaccionar ante ella.