
Sin autoestima te saboteas tanto por no creer en ti mismo, que te esfuerzas por demostrarte que no vales y terminas en el mismo ciclo del victimismo.
Si en realidad deseas una sana autoestima, mi invitación es a que trabajes muy fuerte en recuperar primero tu amor propio, tal vez así vuelvas a conocerte y a observar todo el valor que tienes para darte y vuelvas a creer en ti solamente.