"Clásicos del Pastor"
En este sermón el pastor explica lo que la Biblia enseña al respecto de lo que pasa cuando morimos. Nosotros estamos compuestos de materia física (cuerpo) y el espíritu o el alma. Cuando una persona muere, su cuerpo regresa al polvo. ¿Qué pasa con el alma?De acuerdo a la Biblia, no existe el purgatorio, ni el limbo. En vida, tenemos oportunidad de pedir perdón por nuestros pecados y recibir a Cristo como Salvador. Cuando un creyente muere cierra los ojos aquí y los abre ante la presencia de Dios. No hay lugares intermedios, no hay lugares de descanso,no hay dormir del alma. Nuestro espíritu estará con el Señor, y no es hasta que Cristo venga por su Iglesia, en el arrebatamiento, que recibiremos un cuerpo transformado, un cuerpo glorificado.Si una persona muere sin Cristo, va al infierno, y allí estará eternamente. Después de morir no existe una segunda oportunidad.¡El momento de recibir a Cristo es ahora!
¿La mayor caída comenzó con una mala decisión? El Pastor David Rodríguez desglosa Génesis 3:6-7.¿Por qué Adán comió el fruto si sabía que era pecado? El análisis revela que su error fue obedecer a su mujer antes que a Dios. La lección de responsabilidad y consecuencias.
No hay verdad en el diablo.
Satanás es el príncipe de este mundo, y como tal, miente y engaña a la gente, para que no crean en Dios, y hagan todo lo opuesto a su Palabra.
Algunas de las grandes mentiras del diablo son:
1. Quédate con el dios que tienes.
2. El diablo no existe.
3. Si Dios es todopoderoso, ¿por qué no detiene el sufrimiento?
4. El éxito, el estatus y el dinero, son el camino a la felicidad.
Los cristianos sabemos que nada puede traer paz a un corazón vacío.
El único capaz de llenar el corazón es Cristo Jesús.
En esta oportunidad queremos dar gracias a Dios por esas cosas que nos transforman y nos doblegan, por esas circunstancias en las que solo cristianos maduros podemos entender que debemos decir: Gracias Dios.
Es necesario que aprendamos que: aunque enfrentemos dolor, pasemos tormentas, enfrentemos el silencio de Dios y el todavía no, hay que agradecer porque no estamos solos, Dios está con nosotros. No importa que estemos atravesando nuestro desierto espiritual, confíe en que Dios le sostiene y démosle Gracias en cualquier circunstancia.
Descubre cómo la fe bíblica no es solo creer en lo invisible, sino que se manifiesta en una vida de adoración sincera, obediencia y entrega a Dios. A través de ejemplos como Abel, Noé, Abraham y Job, aprendemos que la fe nos mueve a dar lo mejor a Dios, a obedecer incluso cuando no entendemos y a permanecer firmes en medio de las pruebas.
¿Qué tan importante es la fe en tu vida diaria? ¿Cómo se refleja en tus prioridades, tu adoración y tu obediencia? Una exhortación para dejar de vivir un evangelio al revés y comenzar a ofrecer un sacrificio excelente al Señor.
La vida cristiana es un viaje, y para terminar exitosamente es necesario creer y obedecer a Dios como lo hizo Abraham. El camino estará lleno de obstáculos, pero debemos creer lo que Dios nos ha prometido. La escritura que estudiamos esta tarde nos recuerda que somos extranjeros en esta tierra y que el Dios fiel nos ha prometido una patria celestial. Abraham no vio la promesa pero creyó, seamos como Abraham Nosotros también y creamosle a Dios.
En este estudio, el Pastor nos enseña acerca de quién era satanás antes de su caída. Que es un ser creado, y que su belleza inigualable, lo llenó de orgullo y soberbia, y quiso estar por encima de su creador. Se rebeló contra Dios, y esto le trajo como consecuencia que fuera expulsado de del Cielo, y enviado a la tierra con sus ángeles.
Satanás es el príncipe de este mundo, el engañador, que influye en la gente para opornerlos a Dios.
En su caída trajo consigo la presencia del mal a la tierra.
El diablo no es ni omnipresente ni omnisciente, y sigue siendo siervo de Dios, pues sin su autorización él no puede actuar.
Según la Biblia, al final de los tiempos, satanás, la bestia y el falso profeta (trinidad satánica), serán derrotados y confinados al lago de fuego para siempre.
En esta poderosa predicación, exploramos la verdad bíblica sobre la resurrección y la eternidad a través de Lucas 20:27-38. Descubre por qué Jesús declaró que Dios no es Dios de muertos, sino de vivos y cómo esta verdad transforma nuestra esperanza frente a la muerte.
Acompañanos en un análisis profundo de las Escrituras que desafía las dudas y fortalece la fe en la promesa de la vida eterna. ¡No te pierdas este mensaje que reaffirma que en Cristo, ¡la muerte no tiene la última palabra!
La prédica de esta noche nos habla sobre los principios bíblicos de la prosperidad, que nos recuerdan que las bendiciones de Dios no se limitan a lo material, sino que alcanzan todas las áreas de nuestra vida cuando vivimos conforme a Su Palabra:
5. Principio de la expectativa
6. Principio de la generosidad
7. Principio de la siembra y la cosecha
8. Principio de la honra
9. Principio de prioridades del Reino
10. Principio del trabajo diligente y honesto
Aprendemos que la verdadera prosperidad va más allá del dinero y se fundamenta en los valores eternos del Reino, guiándonos a vivir con propósito, integridad y dependencia de Dios.
En este capítulo, hay una conversación acalorada de Jesús con los judíos, relacionada con la Verdad. La "verdad" se menciona siete veces en esta conversación.
Nuestra verdad es Dios, Jesús, y su Palabra (la Biblia).
La primera mentira ocurrió en Génesis, cuando la astuta serpiente (satanás), engañó a Eva y a Adán.
De igual manera, hoy en día el diablo está en todas partes, tergiverzando las cosas, haciéndonos creer que todo es relativo, llamando a lo bueno malo, y a lo malo bueno.
Pero, no existe verdad en el diablo. Su propósito en el Edén era confundir a Adán y Eva, y trata de hacer lo mismo en el pueblo de Dios.
Los cristianos debemos estar ciertos sobre qué cosas son aceptables y cuáles no dentro del Evangelio.
En este estudio, el Pastor, apoyado en la Biblia, enseña que Jesucristo es, sin lugar a dudas, el Hijo de Dios.
Los judíos no creen que Jesús es Dios, pero nosotros, los cristianos evangélicos, sabemos que Jesús es Dios mismo porque lo confirma la Biblia.
Los judíos preguntaron a Jesús si él era el Mesías (el Cristo), pues querían eliminarlo, apedrearlo. Jesús les dijo que ya se los había dicho, pero que no le creyeron, pues no eran de "sus ovejas". Sus ovejas lo seguían, y él les daba vida eterna (la salvación), sin perecer jamás.
Juan 1 1-4, confirma que Jesucristo es Dios, porque él es el Verbo, el Creador, la Vida, la Luz.
Él y el Padre uno son.
Esta tarde continuamos el estudio acerca de la Fe, nos pondremos el termómetro para analizar cómo está nuestra Fe. En este sermón el predicador nos enseña que Una fe muerta no sirve para nada, por eso es necesario alimentarla con la palabra de Dios para que crezca. La manera de saber que nuestra fe no está muerta es cuando damos frutos, hacemos acciones que demuestren que nuestra fe está viva para la gloria de Dios.
La prédica de esta noche nos enseña sobre los 10 principios fundamentales de la prosperidad, no se trata solo de dinero, sino son aplicables a todos los aspectos de nuestra vida.
Los principios bíblicos de finanzas son :
1. Dios es dueño de todo.
2. Lo que tengo, Dios me lo da.
3. Lo que tengo no es mío, es de Él
4. Las riquezas son pasajeras.
Dios bendice a quienes evitan malos consejos y malas compañías, y viven para la gloria de Su nombre. El amor al dinero es la raíz de todos los males. Por eso, debemos buscar primero el reino de Dios y su justicia, enfocarnos en las cosas celestiales y vivir con integridad y propósito divino.
Jesús estableció un mandamiento nuevo sobre el amor verdadero, presentado en tres niveles: primero, amar al prójimo como a uno mismo, según la ley antigua; segundo, amar como Dios nos ama, incluyendo incluso a los enemigos con un amor sacrificial; y tercero, enfocarse en amar especialmente a los hermanos en la fe, pues nuestras acciones hacia ellos son como si fueran hechas para Jesús. El mensaje concluye advirtiendo que, si no amamos a nuestros hermanos, nuestra fe está engañada, e invita a reflexionar sobre cómo vivimos este amor en nuestra vida cristiana.
En el sermón de esta tarde continuamosEn el sermón de esta tarde continuamos estudiando la Fe. En esta oportunidad el predicador nos explica algunas de las características que debemos tener para saber cuándo tenemos Una fe que no se rinde. Si su fe no duda, si enfrenta la oposición, si solo tiene la mirada en Cristo, si es inquebrantable, si da honra al Señor en medio de la prueba, si no se queja y si entiende que nada nos puede apartar del amor de Dios, podemos decir que nuestra fe es victoriosa porque no se rinde.
Al hablar de la fe recordamos que la Biblia dice que es imposible agradar a Dios si no tenemos fe. En esta sermón aprendemos algunas de las causas por las que algunos Perdieron la fe; por ejemplo: descuido espiritual, unirnos a personas equivocadas entre otras. Podemos reflexionar que si nuestra fe muere, no nos queda nada. ¡Anímese hermano!, también aprendemos qué hacer para no perder la fe.
La prédica de esta noche nos enseña que Dios le dio a Daniel conocimiento, discernimiento e inteligencia. En nuestro caminar diario, es importante avanzar un escalón más. Muchas veces, como en una montaña rusa, no llegamos a la cima por obstáculos como el miedo, la pereza o el conformismo.
Para alcanzar nuestras metas necesitamos disciplina, constancia y aspirar siempre a lo mejor, para la gloria de Dios. La preparación y la educación forman parte del llamado de Dios, quien las usa para moldearnos y darnos propósito. Él quiere que seamos de bendición para otros, guiándonos siempre con su mano y su plan perfecto para nuestras vidas.
Este capítulo relata cómo Israel, tras ofender a Dios, es oprimido por Jabín y Sísara, pero Débora y Barac los liberan; el Pastor, tomando a Débora como referencia, analiza el rol de la mujer en el pastorado, distinguiendo tres posturas: igualitaria, jerárquica y complementaria (la de su iglesia), que valora la igualdad en dignidad pero reserva el liderazgo pastoral para hombres, señalando que, aunque las mujeres son mayoría en las iglesias, sus dones deben usarse para servir sin aspirar a la ordenación pastoral.
El sermón de esta tarde nos hace reflexionar en lo importante que es nuestra fe y cómo nos ayuda a conectar con Dios. El predicador expone elementos de la fe que nos debe motivar a pedirle a Dios que aumente cada día nuestra fe. El cristiano con fe elimina lo negativo, no se preocupa por todas las cosas, no se enfoca en las circunstancias y no entran en pánico cuando atraviesan una tormenta. Recuerde hermano que la fe está fundada en el poder de Dios.
En este sermón se hace una introducción al estudio del libro de los Jueces. Además, se aborda la situación histórica y actual del pueblo de Israel, reflexionando sobre las consecuencias de la desobediencia a los mandatos divinos, que han llevado a conflictos prolongados que tuvieron su origen por aquellos tiempos.