🍂 Noviembre: Tiempo de Silencio, Tiempo de Dios
Los días se acortan.
El aire cambia.
La tierra se cubre de tonos apagados.
La naturaleza baja el ritmo y nos invita a hacer lo mismo.
Noviembre llega sin prisa, con su luz suave, como un susurro que nos recuerda:
no todo lo que crece se ve.
Hay raíces que se afianzan en la oscuridad.
Hay promesas que germinan en el silencio.
Hay obras de Dios que avanzan en lo oculto.
Este mes, haz una pausa cada día.
Respira sin correr.
Escucha sin responder.
Confía sin entender.
Aunque todo parezca quieto…
Dios sigue obrando.
Él trabaja en lo profundo, en lo invisible, en lo pequeño.
Y su obra, aunque a veces no la veamos, nunca se detiene.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
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Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Los días se vuelven más cortos, el ritmo baja, y la naturaleza con su quietud, nos recuerda que no todo crecimiento es visible.
Es tiempo de confiar en lo que Dios hace en lo oculto.
Él actúa en el silencio, en lo pequeño, en lo que aún no entendemos… pero su obra nunca se detiene.
Este mes, regálate un momento cada día:
Respira. Escucha. Confía.
Aunque todo parezca quieto, Dios sigue obrando.
Octubre llega con un aire distinto: el ritmo baja, la luz cambia, y la naturaleza parece recordarnos que también nosotros necesitamos detenernos un poco.
Este mes es una invitación a confiar en lo que crece en silencio. A veces, Dios trabaja en lo oculto, en lo que no se ve, pero siempre da fruto a su tiempo.
Tómate un momento cada día. Escucha, respira, confía.Dios sigue obrando, incluso cuando todo parece quieto.
Octubre llega con un aire distinto: el ritmo baja, la luz cambia, y la naturaleza parece recordarnos que también nosotros necesitamos detenernos un poco.
Este mes es una invitación a confiar en lo que crece en silencio. A veces, Dios trabaja en lo oculto, en lo que no se ve, pero siempre da fruto a su tiempo.
Tómate un momento cada día. Escucha, respira, confía.Dios sigue obrando, incluso cuando todo parece quieto.