
En las ultimas décadas hemos escuchado muchos nuevos acercamientos al concepto que hoy en día tenemos de salud mental. Se habla de la salud mental como un estado de bienestar general y no como la ausencia de enfermedad.
¿Pero que pasa si ese estado de bienestar general se ve interrumpido? ¿Entonces significa que estamos locos?
Si vemos la salud mental sólo con un estado de ecuanimidad absoluta entones sí, todos estamos locos. Pero si entendemos que parte de la vida es atravesar situaciones emocionalmente complicadas y que nuestra capacidad de afrontar y procesar esos cambios es lo que define nuestra salud mental entonces hablamos de un concepto más amplio que no está necesariamente dictaminado por nuestro estado de animo.
En este sentido, buscar una explicación a lo que nos pasa es un buen camino, pero buscar ayuda cuando nos sentimos perdidos mental y emocionalmente es mucho mas sabio.