¿Lo pediste? Lo tenés. ¿No lo pediste? Lo tenés igual. Gustavo y Nacho regresan para hablar de bueyes perdidos, comadrejas encontradas, películas de Paul Thomas Anderson y escenas de riesgo de Tom Cruise. Con la Inteligencia Artificial como un enemigo que jamás los dejará sin trabajo, porque no son inteligentes.
Gustavo y Nacho las saben prácticamente todas. No sabían cuál es la mejor historieta del mundo, así que decidieron preguntarle a CINCUENTA notables del arte, la ciencia y otros menesteres, quienes aportaron cincuenta granitos de arena. Cada uno de ellos genial, pero juntos son incongruentes y poco útiles.
Acompañen a Gustavo y Nacho mientras almuerzan emparedados. Claro que el alimento será solamente un punto de partida para discutir acerca de las temáticas más profundas que rodean al ser humano, como la política exterior de Nepal o la forma en que se atan los cordones en Massachusetts.
¿Se pueden tener demasiados libros? Técnicamente, lo que se puede tener es poco espacio. Así lo demuestran Gustavo y Nacho en una charla sobre ventas de garage, coleccionismo y otras yerbas. Por ejemplo, las personas que coleccionan yerba. Pero ese es otro cantar, u otro chupar.
Desde dos camarotes diferentes de un barco que navega cerca de Mar del Plata, Gustavo y Nacho analizan las diferentes especies que van descubriendo, mientras conversan de vicisitudes de la vida, como los perros que ladran en noruego o la distancia más corta entre Montevideo y Buenos Aires (este podcast).
¿Es un pájaro? ¿Es un avión? ¡No! Son Gustavo y Nacho hablando de la nueva película de Superman, sin spoilers. Por las dudas. Porque capaz que todavía no la viste. Igual, si no la viste, en lugar de estar escuchando este podcast deberías estar yendo al cine a verla. A la vuelta dale play.
Especial grabado en vivo en Espacio Moebius, que sirvió de presentación de la reedición de “Sobredosis Pop”, el primer libro de Nacho. Junto a Gustavo entretuvieron a los presentes hablando de dicha obra, pero también de muchas otras cosas, como la que se combinó para dar origen al título del episodio.
Diez años después, Gustavo y Nacho siguen teniendo conversaciones interesantísimas que podrían cambiar el curso de la humanidad. Allí se discute desde Emilia Pérez hasta la distancia entre las galaxias. Desde Anora hasta el punto de ebullición del pollo. Como ven, alguna que otra película comentaron.
¿Será que Gustavo y Nacho realmente invocaron sus espíritus navideños y repartieron regalos virtuales a sus oyentes de todo el mundo? ¿O será una simple estrategia para engañar al algoritmo y a esos mismos oyentes a los que nos referíamos en la pregunta anterior? La respuesta no los conformará.
Un episodio muy especial, porque todos lo son. Comenzó en un bar, ganó la calle (no Lacalle), hubo viaje en ómnibus y nuevas recorridas. Conocimos una partecita pequeña y no tan violenta de Montevideo, hablando (entre otras cosas) de un montón de cosas. Qué sé yo, ya ni me acuerdo de lo que hablamos.
¡El episodio más largo de nuestra larga historia! Grabado íntegramente en el bar Las Flores de Montevideo, único recinto con la confianza suficiente como para soportar a Gustavo y Nacho durante dos horas y media. La realidad es que terminaron quedándose como seis horas. ¡Conozcan la voz de Julio!
Una vez que pasás el primer centenar de episodios, todo se vuelve mucho más sencillo. Sobre todo cuando desde la producción de Montevideo Comics te invitan a hacer el programa en el mismo escenario que usó The Cure unos meses antes. Nosotros, por supuesto, convocamos a más gente.
Todo lo que escuchaste fue para llegar a este momento. Años de subtramas que parecían haber sido abandonadas tienen su cierre en una escena de acción que reíte de Avengers: Endgame. Y al igual que con Avengers: Endgame, todo lo que vendrá después de este episodio será mediocre y aburrido.
Estamos a un solo episodio de los 100 y nuestros simpáticos protagonistas dan pistas de la fiesta que se viene. Se habla de temas filosóficos, pero también se repasan los últimos acontecimientos de la farándula y hasta hay un momento para la teología en el mantenimiento de bonsáis. Todo eso, mientras Nacho pilota un robot.
Gustavo y Nacho están de regreso, más monos que nunca. Uno se convirtió en mayordomo de Arturo Puig, el otro es uruguayo así que no le pasan cosas interesantes. Juntos conversan de la vida, de la muerte y del murciélago que pide sorrentinos utilizando papelitos con mensajes.
Nunca jamás este programa tuvo a tantas personas invitadas. Que, además, fueron invitadas durante la grabación y se animaron a colaborar. Este también es el episodio más extenso de los 97 publicados hasta el momento, así que espero que ustedes sean personas agradecidas y lo escuchen.
Mientras una paloma espía los vigila desde lo más alto de un aire acondicionado, Gustavo y Nacho se meten en un laberinto nostálgico que gira alrededor de Jordy, el pequeño cantante de 4 días y medio. En el medio pasan otras cosas, igual de importantes, que ustedes irán descubriendo con el tiempo.
Gustavo y Nacho tienen una duda y no es la podonga. Ya quisieran. Una frase surgió en medio de la conversación completamente guionada y para terminar con una duda existencial consultaron a dos expertos cinematográficos de ambos lados del río. Pero ¿quién terminará haciéndole la cola a quién?
Gustavo y Nacho están en busca de algo muy importante, pero ¿qué? Eso nos pasa por no escribir estos textos inmediatamente después de la grabación… No nos acordamos qué es lo que buscaban. Y aparentemente el tema de la queja fue acá y no en el 93, error que cometimos por la misma razón expuesta.
El reencuentro entre Gustavo y Nacho se da en un concurrido bar de Buenos Aires, donde entre sánguches de salchicha y nostalgia por una asesina serial se discuten de muchos temas. El título sobre la queja es un error, porque en realidad de eso hablamos en otro, pero ahora ya está.