
“Toda la sangre puede ser canción en el viento”, cantó con la gente un febrero de 1978. La cantante tucumana, conocida como La Negra, Mercedes Sosa fue una artista reconocida del folclore. Su voz y sus canciones llenas de ideas y política, emocionaron a algunos y enojaron a otros. Fue ese enojo lo que obligó a la artista a exiliarse para volver al país junto con la democracia.