
Hay comidas que se vuelven inolvidables por lo que representan: una celebración, una despedida, o un momento especial. ¿Alguna vez fuiste parte de una comida que recordás para siempre? Jesús quiso que sus discípulos participaran de una cena muy especial, no sólo para recordar, sino para entender lo que estaba por suceder: Su entrega total por amor a nosotros.