
Dani vivía en una relación sin propósito y sin amor, pero un encuentro inesperado con Dios lo cambió todo. Él restauró sus corazones y de lo roto, nació una promesa como familia. Hoy, Dani ve cómo Dios la ha cuidado desde niña y cómo ahora enfrenta todo tomada de la mano de Aquel que nunca la ha soltado.