
La tarea básica de la creatura es llevar gloria al nombre del creador, pero en el estado actual del ser humano esto no puede dejarse a la espontaneidad. En este Salmo David hace un esfuerzo activo, primero por involucrarse él mismo en la adoración y luego por involucrar a su pueblo y después a toda la creación. Una razón importante para el culto público es estimularnos los unos a los otros; ser invitados activamente a participar de la adoración.