
Al recibir a Jesucristo en tu vida, o renovar tu pacto con Él, es importante que te acerques y aprendas a oír su voz. Empieza a ejercitar tus sentidos espirituales para captar cuando te está hablando y hacia donde te dirige cada día. “Dios es espíritu y los que le adoran, en espíritu y verdad es necesario que le adoren” Juan 4:24. Mucha gente hoy se queja de que Dios no les habla; pero, y ¿si Dios sí les ha hablado? Cuántos en aquel día tendrán que reconocer que fueron indiferentes a la dirección y guianza de Dios para sus vidas.