Píldora para recordar.
Feliz cumpleaños, hija mía.
«Dedícate a sacar adelante a tu hija. No puedes pensar en pareja, él sí puede tenerla. Claro que puede tener pareja desde que tú estás en embarazo, pero tú no».
La maternidad vivida en tribu y bajo la protección del Estado.
"La última vez que hablamos nos despedimos de muy mala forma. Lo siento, no debí decir muchas cosas que te causan dolor".
Me veo despidiéndome de las horas de juego, de la preparación de las comidas y de la recogida de los niños en el jardín, del paseo diario por el parque del barrio. Estoy más que lista para retomar mi vida laboral, viajar y hacer contactos en cada lugar.
La familia no estaba en mis planes, sí en los de él, pero no conmigo. Lo supe a los tres de meses de embarazo. Me hizo saber que no le gustan los personajes de esta historia por lo que quiere cambiarlos, acomodarlos y ajustarlos.
La historia se repite todas las noches, una y otra vez. Me embriaga el amor tan fuerte y tranquilo que siento por mi marido y mis hijos. ¿Lo tengo todo?
Un día, cuando estaba muy pequeña, Elena me contó una historia muy particular. Una noche en su pueblo natal, cuando Elena tenía diez años entró al que ella pensaba era el estudio de su papá. Un cuarto pequeño y oscuro al que, un día, de repente, le prohibió entrar.
Un podcast de Andrea Dávila Claro @andreadavilacla
Producido en D.A.Y. Estudio