
Nayeli Sandoval se convirtió en mamá de Camila en la semana 31 de embarazo, tras un diagnóstico de preeclampsia que obligó a interrumpir la gestación. Al segundo día de nacida, recibió la noticia de que su hija probablemente tenía síndrome de Down, confirmación que llegó semanas después de la forma más dura y poco empática.
Entre miedos, lágrimas y un proceso de duelo, Nayeli decidió ver a Cami como lo que siempre fue: su hija, con sueños y capacidades.