
El arte es el espejo del alma y Enrique Pichardo nos lo recuerda. Para desarrollar tu estilo y evolucionar como artista es importante crecer a nivel personal. Porque al hacerlo nos hacemos consientes de crear no desde el ego, sino guiados con pasión por una causa más allá del producto mismo. Creer en tu proceso, en tu arte, y mostrarlo desde la autenticidad potencializa quien eres tú cuando lo haces y por lo tanto el resultado de la misma obra.