El gobierno viene haciendo ajustes de política monetaria desde hace 35 días, una señal inequívoca de que no consigue un equilibrio. La prioridad es controlar el dólar, pese a que la inflación tuvo un buen registro en julio. El tema es que la tasa pasó de 29 a 75% y eso tarde o temprano tendrá efectos en la actividad y la cadena de pagos. La apuesta es que no esto no afecte las elecciones, pero hay algún riesgo ahí. Mientras tanto la inflación núcleo tiró el registro más bajo desde noviembre 2017. Un logro importante. Esta semana va a ser muy importante en la política, la economía y las finanzas.