
Mirtha es la persona que te encontrás si tenés la suerte de tu lado, porque son especiales, no abundan. Es la flor en el desierto, que convierte tus días en menos monótonos y te enseña a valorar tu lugar, tus historias y recuerdos.
Mirtha lleva en sus genes la música, la radio, las historias, sus amigos y los cuidados de madre. Muy generosamente me regaló para mi colección de historias, muchas partes de su vida, junto a mujeres que ayudaron a construir nuestro lugar.
Hoy les regalo la historia de Rosita de Cury, enfermera del hospital de YPF, que tenía el poder en sus manos de aliviar los dolores del cuerpo, dotada de una belleza singular y espíritu valiente para sobrellevar la rispidez de la época.