
Una de las principales causas de nuestro fracaso, tanto social como en otras áreas de nuestra vida, es la falta de iniciativa, no animarnos a dar el primer paso y dejarnos atrapar por la cómoda y egañosa zona de confort. Pero, ¿por qué no obligarnos a hacerlo?, ¿y confíar en que la inercia de dar el primer paso nos guiará por el camino correcto? Para ello resulta necesario tener presente que la práctica nos permitirá eventualmente desarrollar habilidades que desde nuestra trinchera resulta imposible lograr.
Escucha ya el episodio #11 de Introversando, y descubramos juntos cómo desarrollar nuestra propia metodología que nos permitirá aumentar la iniciativa y hacer las cosas a pesar de la "falta de ganas".