
El hermano Jorge nos anima a ser una iglesia constante en la oración e interceder por los hermanos. Ser un ejemplo de fe, trabajo y constancia en la obra de Dios.
Nos exhorta a ser imitadores de Cristo y recibir la palabra y recordar constantemente el evangelio para santificación y crecimiento personal y de esa manera ser un ejemplo y buen testimonio a las demás iglesias y en el lugar en el que estamos.