No promuevo en mi podcast ni el maltrato, ni la violencia. En mi podcast hago una CLARÍSIMA Invitación a dejarse de mariqueras, a ponerse duros, estrictos, a asumir DE VERDAD ese título de “Padre o Madre”.
Porque tener y criar un muchacho no es solo “darle la libertad y que tenga su propio espacio creativo”. Esa libertad y ese espacio creativo deben ser supervisados, controlados, y dejando claro siempre que hay consecuencias por los actos.
En estos tiempos, en donde las minorías hacen temblar y cambiar a las minorías, en donde los malos ahora son los buenos, y en donde es raro ser normal, ser heterosexual o hablar bien, cobra vital importancia el reforzamiento familiar.
¡Y si no quieren tener muchachos tiren por el culo!
¡Estamos de celebración!
Abril es un mes especial para mí, y aquí estoy otra vez, 13 veces después de haber empezado en 2010.
Aquí cuento un poco mi evolución y recorrido, mi paso por diversos espacios y actividades en digital; y cuento lo bueno y lo malo que he visto en estos 13 años.
Gracias por escucharme, leerme y seguirme en estos 13 años. ¡Sigamos siendo inconformes!
¡Saludos, Inconformes!
Vuelvo a las andadas aquí en el podcast. Luego de 3 semanas con Covid (realmente fueron 2), y de recuperar mi voz, vuelvo al podcast, y a activarme poco a poco con mis actividades habituales.
Como les cuento en el podcast, sí, ¡me agarró el fucking Covid! Tanto cuidarme y encerrarme por 1 año y medio para nada… pero bueno, así son las cosas.
A ti que estás leyendo esto y vas a escuchar este nuevo episodio, ¿Ya te dio Covid? ¿Cómo fue tu experiencia? ¿Casi te lleva La Pelona? ¿Viste la luz al final de túnel?
En este episodio de hoy escucharás un poco de mi experiencia y mi testimonio. Me gustaría saber el tuyo, así que déjame tu comentario.
¡2022, sorpréndenos! Y aquí está… algo que muchos pensábamos superado hace casi 80 años, es hoy, en pleno 2022, una realidad más probable que nunca: un cataclismo nuclear por culpa de la invasión de Rusia a Ucrania. ☠️
Ya se nos olvidó el Covid, se nos olvidó China, se nos olvidó Maduro, se nos olvidó el tapabocas, se nos olvidó la vacuna, se nos olvidó Bill Gates, se nos olvidó el dólar paralelo, se nos olvidaron los migrantes, se nos olvidó la xenofobia contra los venezolanos, se nos olvidó que no hay efectivo, gasolina o agua, en fin, ¡se nos ha olvidado toda vaina!
Ahorita en las redes solo se habla de eso: de la invasión de Rusia a Ucrania. 🇺🇦
Pero aunque muchos hablan del tema por pasteleros, por farandis o porque simplemente siguen las tendencias, ustedes saben que mis análisis y reflexiones están lejos de eso.
Tenía en mente este tema de las mentiras de los ODS desde hace tiempo. Quería escribir mi opinión inconforme la respecto porque siempre leo a mucha gente repitiendo las mismas mentiras de los políticos y burócratas. ¡Qué pendejos!
¡Y vamos! Que los ODS son como el socialismo: ¡Son una muy bonita utopía!
En la teoría, en el papel, todos se lee muy bonito. Pero cuando lo analizamos en frío, con datos reales de lo que verdaderamente “se ha logrado” gracias a su agenda, es que nos damos cuenta de la gran mentira que son los ODS.
Es decir, al fin del cuento, los ODS terminan siendo una gran mentira, un autoengaño del planeta en el que todos aplauden algo que quisieran tener pero que son muy poquitos los que dan el primer paso.
Como decimos aquí en Venezuela: “Un solo palo no hace montañas”. Así que muchos seguirán comiéndose el mojón y las mentiras de los ODS.
Yo no me los creo. ¿Y tú?
Aquí te explico cada uno de ellos y sus mentiras.
¡Hablemos de cocaína!
Pero no del narcochavismo. No. Hablemos de series de ficción por Netflix. Y sí, me refiero a la brutal serie Narcos.
En meses recientes se publicó en Netflix la última temporada de a aplaudida serie Narcos México, secuela de la original Narcos (Colombia).
Si no te gustan este tipo de películas o series, este podcast no es para ti. Pero si disfrutas, como yo, de estas historias de intrincada mafia que corrompe todos los estamentos de la sociedad, ¡entonces quédate y sigue leyendo!
En este episodio (que grabé en diciembre de 2021), hablo de mis apreciaciones de la serie y te hago spoiler. O no, porque si a ver vamos, esta serie narra hechos históricos de nuestros países, de nuestra Latinoamérica. Narra hechos recientes que muchos de nosotros vivimos y recordamos. Así que spoiler, spoiler, no hay.
Hablar del crimen de Edmundo Chirinos en Venezuela es hablar de unos de lo crímenes más sonados en nuestra historia contemporánea reciente.
Y no tanto por lo sangriento o macabro del mismo (porque han habido crímenes más truculentos que este), sino porque fue un caso que vino a demostrar lo descompuesto de nuestra sociedad a nivel político, a nivel social, a nivel policial, a nivel profesional y moral.
El crimen de Edmundo Chirinos es una triste mancha en nuestra historia, que deja al descubierto lo peligroso de endiosar, de dar por sentado que alguien de “autoridad” es de fiar; y peor aún, ¿Cuántos verdugos más hay por ahí vestidos de políticos, de doctores, de profesores, de abogados?
Personalmente tengo vagos recuerdos de Edmundo Chirinos. Creo que fue en los 90 cuando lo vi en TV como candidato presidencial, pero en esa época, como la mayoría de los de mi generación, era un total ignorante de la situación política de mi país. Años después lo vi en entrevistas, ya embarrado en mierda vinculado con Chávez.
El Libro Negro de la Nueva Izquierda es un libro polémico por donde se le mire. Desde su portada, el contenido, el nombre, sus autores, ¡todo!
Si ya lo leíste, te gustó y estás de acuerdo con las tesis expuestas por sus autores, Agustín Laje y Nicolás Márquez, eres de los míos. Simplemente porque estás completamente EN CONTRA de la maricura generalizada en que se ha convertido todo eso de la ideología de género, el feminismo, el aborto, el matrimonio homosexual, etc.
Si ya lo leíste y no te gustó, no estás de acuerdo con sus autores y sientes que es una obra ofensiva, extremista, clasista y peyorativa por donde se le mire… ¿qué podemos hacer? No sigas leyendo… Con total seguridad no te gustará mi podcast.
El juego del calamar, eso de lo que todos hablan, esa serie que todos recomiendan, esos memes que inundan las redes y de lo que todos hablan.
Resulta bastante difícil de creer que a estas aturas no hayas visto la serie, o que al menos hayas escuchado de ella. Así sea el tráiler debes haber visto por YouTube.
Así que ya sabes de qué hablaré en este episodio. Del bendito Squid Game, mejor conocido como El Juego del Calamar, la serie de Netflix que se estrenó en septiembre de este año y que ha resultado un fenómeno mediático.
Pero no voy a hacer aquí análisis de cuánto ha generado esta serie en views o recaudación. Dejemos esos aburridos análisis a los expertos del tema.
En este episodio te daré mi opinión acerca de la serie, de algunos de sus personajes y te contaré de qué va la serie como si estuviéramos en Venezuela. Creo que estos análisis de los “no expertos” en el tema de las series y películas resultan mas interesantes para el público común como tú y como yo.
¡Hablemos de estos locos! Los fanáticos digitales, esos loquitos que están en TODAS PARTES, aparecen cuando menos te lo esperas, te abordan, te escriben, te interrumpen o te invitan a su mundo de mentira de forma insistente.
Sí, me refiero a los fanáticos digitales que tanto han invadido nuestra vida digital y que tanto daño le hacen a los que son profesionales de verdad en sus rubros, sus áreas profesionales y y sus nichos.
La idea de este podcast me surgió cuando leía un de esas barrabasadas que emiten estos pobres diablos en varios grupos X por ahí. Yo leía las sandeces y me preguntaba: De todos estos gremios de locos, ¿cuál será el peor? 🤔
Siempre lo digo: en las redes sociales, en los foros, en los grupos, en Internet en general, HAY MUCHA MIERDA, y Netflix no es la excepción. Pero como todo: hay que saber separar la paja del trigo. Si uno busca bien en Netflix, en YouTube, en Instagram o en TikTok, de seguro encontrará cuentas o canales con mucho buen contenido, con vainas interesantes y que de verdad te dejen algún aporte. Tal es el caso de la serie que analizo en este episodio de Mundo Inconforme.
Estoy muy filosófico en este post, pero es por una buena razón: vi la serie / documental “Cómo se convirtieron en tiranos” y me dejó pensativo acerca de lo predecibles que han sido todos los monstruos mencionados en ella.
En la serie, de tan solo 6 capítulos (yo espero que vengan con una 2da temporada, con nuestros tiranos latinoamericanos), podemos observar no una biografía de los aludidos tiranos, pero sí cómo llegaron al poder, cómo lo obtuvieron y cómo lo mantuvieron a sangre y fuego, literalmente.
Es así como en el documental se habla de:
Adolf Hitler
Saddam Hussein
Idi Amin
Joseph Stalin
Muammar Gaddafi
La Dinastía Kim
¡Es imperdible esta serie!
En el año 1983 salía en TV la serie de He-Man, un personaje papiado y catirito que siempre ha dado de qué hablar. He-Man fue por más de una década la obsesión infantil de quienes vimos la serie y capítulo tras capítulo lo veíamos siempre ganarle a Skeletor.
Luego del anterior párrafo tan gay, no te debe quedar dudas de que sí, vi He-Man en los 80; y cual fue mi agradable sorpresa cuando supe que volvería, esta vez por Netflix.
La serie original contaba con más de 100 capítulos, así que cuando la anunciaron por Netflix me dije: “no voy a poder ver tantos capítulos” (bendita vida de adulto), pero cuál sería mi sorpresa al ver que la 1ra temporada tan solo consta de 5 episodios, así que decidí verla en un par de días para hacerles un podcast. Es por eso que aquí va mi análisis inconforme acerca de esta serie que fue a delicia de muchos hace casi 40 años.
Aviso de spoilers. Si no la has visto es momento de que te montes en tu gato, como He-Man, y desaparezcas de aquí. Pero si no te importa que te eche el cuento sin verla, sigue leyendo…