"Nos enamoramos, nos juntamos... y de repente todo termina"
El divorcio es comparado con un proceso de duelo por su magnitud y porque constituye una transformación radical del entorno cotidiano.
La separación es vivida como una perdida que genera emociones, esta transición es muy compleja, ya que se culmina la relación conyuga, pero la relación parental sigue vigente cuando hay hijos.
La familia transita por diversas crisis, cambios que deben de aprender a superar y a reorganizarse en esta nueva dinámica familiar.
- Crisis emocional, las personas suelen vivir un cumulo de emociones (desilusión, insatisfacción, incertidumbre, temor, ambivalencia, vacío, enojo, etc.) al darse cuenta del deterioro de su relación y comenzar a valorar la alternativa de la separación.
- Crisis legal. Cuando ya se intento mucho o poco, y la pareja o uno de sus miembros toma la decisión de separase e iniciar con tramites legales, es otra crisis en la que se experimenta estados de enojo, indefensión, etc.
- Crisis económica, comienza el reparto de los bienes. El divorcio genera cambios económicos, cada miembro de la pareja tendrá gastos propios y en conjunto, que puede desestabilizar a los miembros de la familia; incluso los hijos pueden llegar a resentir esta crisis.
- Crisis social, la esfera social también sufre cambios, los vínculos familiares con los amigos puede verse deteriorado, ya que algunos toman partido por algún miembro de la relación de pareja, generando sentimientos de tensión y rechazo.
- crisis coparental, surgen preocupaciones por los hijos, tanto el padre o la madre buscan redes de apoyo para cubrir la ausencia del otro; lo idóneo es que ambos sigan contribuyendo en la crianza de su hijo/a, evitando la interferencia parental, o el distanciamiento; el divorcio acaba con la relación de pareja, pero no con la relación parental.
Como cualquier crisis la separación es una oportunidad de construirse, fortalecerse, renovarse y seguir adelante.
Los hijos también experimentan una crisis y necesitarán ayuda para aprender a gestionar sus emociones, entre mas preparado/a estés podrás ayudarlos a comprender y adaptarse a estas nuevas etapas.
Recomendación de Libros.
- Ya te dije adiós ahora te olvido, manual para no morir de amor, desapegarse sin anestesia, enamórate de ti. Walter Riso
- Separación y divorcio como no afectar a mi hijo, Juan Pablo Arredondo, Edit. Vergara.
- Padres separados: como criar juntos a los hijos, Jorge Ferrari, Edit. Trillas.
Te compartimos la Píldora de sanación emocional, la cual consiste en recomendaciones y/o ejercicios.
- Protege tu corazón, evita engancharte.
- Alivia tus emociones (con una lectura, actividades de interés personal, salir a caminar, hacer ejercicio, arte, pintura, música).
- Busca apoyo con un profesional (un psicoterapeuta, ir a un masaje, una guía espiritual, etc.)
- Evita utilizar a tus hijos como espada o como aliado, evita involucrarlos en los procesos legales.
- Se impecable con tus palabras, condúcete con respeto y diplomacia.
