
27 de octubre de 2025
¡Cuántas veces nos perdemos de Dios por aferrarnos a nuestros ritos! La misa y nuestras devociones son muy necesarias, pero jamás sustituirán el Amor que hemos de vivir entre nosotros. Al final de nuestras vidas no te preguntarán: ¿a cuántas misas fuiste?, más bien te preguntarán: ¿Cuánto has amado?Â
Hoy, estemos atentos a las ocasiones en que podamos compartir la Misericordia que Dios ya compartió con nosotros.
Buen inicio de semana,Â
Dios los colme de su gozo y su paz,
Mons. Héctor M. Pérez V.