
17 de octubre de 2025
No debemos confundir, “confianza en Dios”, con “no hacer nada”, ni tampoco podemos suponer que confiar en Dios significa una vida “libre de problemas”. Si no me creen, ¡pregúntenle “al crucificado”!
Que María nos acompañe a enfrentar nuestras pruebas con la confianza que ella nos enseñó, desde la Anunciación hasta la Cruz, ella supo orar al Padre diciendo: “Hágase en mí según tu Palabra”.
Creo Señor, pero ayúdame a confiar en Ti,
Mons. Héctor M. Pérez V.