
Después de 2 años de aciaga pandemia, de la cual aun tenemos secuelas, y misma que aun no deja de ser parte de una cotidianidad en muchas partes del país, con la cual hemos ido aprendiendo a vivir, después de un tiempo lleno de contrariedades y donde en medio de la angustia pudimos haber dudado, en el Templo de la Escuela de Cristo, desde el seno mismo de la sede parroquial, nuestro amigo, confidente, Párroco y presidente de la Hermandad, Pbro. Carlos Rodriguez, mantuvo un fuerte vinculo con todos los grupos parroquiales, pero especialmente con la hermandad del Señor Sepultado y María Santísima de la Soledad, a quienes nos supo mantener firmes en la Fe, y nos motivo en todo momento en perseverar en la misma, hemos sabido llevar sobre nuestros hombros durante el confinamiento le herencia histórica que esta noble institución resguarda, y es que nuestro deber al frente de esta hermandad esta más allá que el solo hecho de resguardar la tradición y sostener todo lo que entorno al SANTO ENTIERRO DE LA ANTIGUA GUATEMALA