
En este episodio reflexiono sobre cómo muchas veces me ponen en el papel de la niña que sufrió un derrame cerebral, como si toda mi identidad se redujera a ese evento. Hablo de lo difícil que puede ser cuando los demás no quieren que mencione ciertos temas, como si todavía estuvieran definidos por esa herida. Comparto mi deseo de ser vista más allá de lo que me pasó, de que se reconozcan mis pensamientos, mis emociones y mis sueños sin estar siempre ligados a ese episodio de mi vida.