
El estrés es un chupito de cianuro y los emprendedores nos pegamos auténticas borracheras… de ahí el dicho que la prisa mata.
Y nos hemos acostumbrados a querer el mañana para ayer por que todo es urgente, todo es importante y esta impaciencia nos persigue y nos genera ansiedad.
Esta viene por la preocupación del mañana los y si… el podría… no vaya a ser… y también de la frustración del ayer, si hubiese… si hubiera… Y es que caemos en la trampa del presente cuando estamos imaginando, visionando nos vamos al futuro pero si te cansas o si te agobias… te vas al pasado y nunca estas en el presente que es lo único que tienes!
Por eso recomiendo meditar parar coger aire, energía y empezar sin los agobios, sin estrés, sin ansiedad y si no tienes tiempo para parar 20 minutos al día porque estás muy ocupado… entonces tienes que parar 1 hora.
Porque me gusta mucho el dicho que dice así… si tiene solución para qué preocuparnos y si no tiene solución para que preocuparnos.
Como líderes tenemos que prepararnos y ocuparnos, centrarnos en nuestro círculo de influencia en el cual nosotros como podemos influir y cambiar, optimizar la situación y salir de nuestro circulo de preocupación toda esa ansiedad, estrés, miedos que no nos conducen a nada porque no podemos cambiarlo…
Y es muy fácil estar presente durante la meditación o durante tu momento de desconexión pero lo difícil aparece en el nivel pro que es estar presentes cuando vienen mal dadas, cuando hay problemas, cuando sube el estrés… ahí es cuando tenemos que meditar y volver al presente no recordar o imaginar errores del pasado y posibles del futuro sino volver a estar presentes.
La meditación no nos hace perfectos o plantas inertes sino que nos permite tras enfadarnos o llenarnos de ilusión volver al presente y cada vez antes, tras la emoción volver a tu ahora y no quedarte en las emociones en 5 o 10 segundos que para tí estos pueden ser 5 minutos… pero ya no serán horas, días con el run run…
Porque van a venir intensas pero de ti depende quedarte en las emociones o entender que las cosas pasan sin más, son hechos, son tu proceso y tu eres quién le añade la percepción de si es bueno o malo.