¿Qué pasa cuando en la vida ocurren eventos que conmueven nuestra vida y en los que nos cuesta ver la manos de Dios?
Una reflexión de Juan 11:20-53
Predica basada en Lucas 22:7-22.
¿Cuantas cosas tenemos hoy por las que dar gracias y no somos capaces de verlo?
Las palabras que salen de nuestra boca son un poder tanto como una responsabilidad. Ellas son escuchadas por otros y también son predicadas a nosotros mismos.
Estamos acostumbrados a pedir perdón sin pedir perdón. Por ello muchos estamos heridos o lastimados, porque no estamos familiarizados con el perdón. Hoy quiero hablar contigo del poder del perdón, y 4 cosas que el mismo debe tener para ser liberador.
Agradecer por tener las manos vacías es contradictorio. Pero la verdadera adoración nace de manos vacías con corazones agradecidos. La lección del Eucaristeo hecho por Jesús. Acompáñeme una de una mis más sinceras exposiciones.
Cuando 4 amigos llevan a un paralitico para que tenga un encuentro con Jesús, se llevarán una sorpresa. Cargaron a su amigo con la esperanza de que Jesús haría un milagro y lo haría caminar, pero Jesús hizo mucho más que eso; Jesús ataca su necesidad principal, la necesidad que todos tenemos. Y hay una enseña aún más profunda: Las raíces de insatisfacción de del corazón humano son muy profundas.
El problema del ser humano no es un problema de conducta. Podemos estar haciendo lo correcto por las razones equivocadas. En este sermón expongo, en palabras de Jesús, la mayor necesidad del corazón humano.