
Vivimos en una cultura que nos programa para la insatisfacción: logras algo y enseguida buscas lo siguiente, como si la felicidad estuviera siempre en la próxima meta. El problema es que, si no aprendemos a agradecer lo que ya tenemos, la vida se convierte en una carrera sin línea de llegada.
En este episodio exploramos cómo funciona la lógica del “nunca es suficiente”, cómo nos atrapa en el trabajo, en las relaciones y en lo personal, y qué pasos concretos podemos dar para romperla.