
A todos nos van a suceder cosas malas en algún punto de nuestra vida. A algunos nos pasan más que a otros. Pero siempre debemos estar conscientes de que todas las cosas malas terminas en algún punto. Al final, siempre sale el sol. Pero mientras eso pasa, tenemos que sostenernos a nuestra esperanza, a la fé que le tenemos a las cosas, y a nosotros mismos.