
La cultura asigna un rol muy importante a la madre y padre biológica, pero la realidad nos muestra que quiénes se dedican a la crianza no son siempre ellos. Situación que puede generar confusión en las personas al sentir en sus experiencias que otra persona ocupa ese espacio, por lo cual es fundamental reflexionar sobre aquello. Las personas que se dedican a criarnos nos transmiten valores, creencias y actitudes. Conocer como influyeron en nosotros es clave para entender lo que nos ocurre de adultos.