
A veces la culpa se disfraza de conciencia.
Nos hace creer que madurar es no equivocarse más,
y que todo lo que duele es un retroceso.
En este episodio, exploramos cómo la culpa se comporta como un plano heredado que seguimos corrigiendo sin cuestionar quién lo dibujó.
Un recorrido entre la arquitectura, la psicología y la ternura, para entender que redibujar también es perdonarse.