
La violencia, como abuso de poder, tiene su origen en lo cultural y es aprendida de modelos sociales vinculados a valores sociales de control y dominio. En este sentido, hay muchas formas de violencia que se aprenden, se enseñan, se fomentan, se legitiman, se autorizan y se convierten en valor social con base en el género. Es el tipo de violencia, justificado por un sistema patriarcal y machista.