
"Que no se angustie tu coraznó. Cree en Dios y cree también en Mí". (Juan 14,1)
Sabemos que a veces es complicado creer, sobre todo cuando vemos el horizonte nublado y nuestra barca comienza a temblar. Tal como los discípulos, comenzamos a tener miedo aunque Jesús va con nosotros en la misma barca.
¿No tenemos acaso un Dios que todo lo puede? ¿No tenemos acaso un Dios que todo lo hace por amor? Creamos en su plan que, aunque no lo entendemos, tiene siempre un propósito en nuestra vida.