En el mundo material, aquel a quien no lo afecta ningún bien o mal que pueda obtener, y que ni lo alaba ni lo desprecia, tiene firmemente en su posesión el conocimiento perfecto.
Aquel cuya mente no se perturba ni siquiera en medio de las tres clases de sufrimientos, ni se alboroza en los momentos de felicidad, y que está libre de apego, temor e ira, se dice que es un sabio de mente estable.
se dice que un hombre se halla en estado de conciencia trascendental pura, cuando abandona todas las variedades de deseos de complacer los sentidos, deseos que surgen de la invención mental, y cuando su mente, purificada de ese modo, encuentra satisfacción únicamente en el ser.
Arjuna dijo: ¡Oh, Kṛṣṇa!, ¿cuáles son las señas de aquel cuya conciencia está absorta así en la trascendencia? ¿Cómo habla y qué lenguaje usa? ¿Cómo se sienta y cómo camina?
Cuando tu mente ya no se perturbe con el florido lenguaje de los Vedas, y cuando permanezca fija en el trance de la autorrealización, habrás llegado entonces a la conciencia divina.
Cuando tu inteligencia haya salido del espeso bosque de la ilusión, te volverás indiferente a todo lo que se ha oído y a todo lo que habrá de oírse.
Por dedicarse de ese modo a prestarle servicio devocional al Señor, grandes sabios o devotos se liberan de los resultados del trabajo en el mundo material. De esa manera, quedan libres del ciclo del nacimiento y la muerte, y alcanzan el estado que se encuentra más allá de todos los sufrimientos [al ir de vuelta a Dios].
Incluso en esta vida, el hombre que está dedicado al servicio devocional se libra tanto de las reacciones buenas como de las malas. Por consiguiente, esfuérzate por el yoga, que es el arte de todo trabajo.
Bhagavad Gita Capitulo 2 texto 50
¡Oh, Dhanañjaya!, mediante el servicio devocional, mantén muy lejos todas las actividades abominables, y en ese estado de conciencia entrégate al Señor. Aquellos que quieren disfrutar de los frutos de su trabajo, son avaros.
Desempeña tu deber de un modo equilibrado, ¡oh, Arjuna!, abandonando todo apego al éxito o al fracaso. Esa clase de ecuanimidad se denomina yoga.
Krishna le dice a Arjuna que debe actuar en el plano del yoga, y ¿Qué es ese yoga?
4 aspectos adicionales que puede dejar este texto para la aplicación diaria.
Tú tienes derecho a desempeñar tu deber prescrito, mas no a los frutos de la acción. Nunca consideres que eres la causa de los resultados de tus actividades, y jamás te apegues a no cumplir con tu deber. 2.47
Una persona tal debe de haber realizado toda clase de penitencias y sacrificios conforme a los rituales védicos, y debe de haber estudiado las Escrituras védicas muchísimas veces, después de bañarse en todos los lugares sagrados de peregrinaje. Se considera que una persona como esa es el mejor miembro de la familia aria».
ientras exista el cuerpo material, habrá acciones y reacciones producto de las modalidades materiales. Uno tiene que aprender a ser tolerante frente a dualidades tales como la felicidad y la aflicción, el frío y el calor; y mediante el hecho de tolerar dichas dualidades, uno debe liberarse de las angustias que se derivan de la pérdida y la ganancia
. El samādhi nunca es posible para las personas que están interesadas en el disfrute material de los sentidos y confundidas por esas cosas temporales. Ellos están más o menos condenados por el proceso de la energía material.
Hombres de escaso conocimiento se apegan mucho a las floridas palabras de los Vedas, que recomiendan diversas actividades fruitivas en aras de la elevación a los planetas celestiales, la consiguiente buena cuna, poder, etc. Como ellos están deseosos de disfrutar de los sentidos y de tener una vida opulenta, dicen que eso es todo lo que hay.
Las actividades fruitivas son las ocupaciones que se obtienen como reacciones de las pasadas acciones malas o buenas.
os beneficios de la actividad con conciencia de Kṛṣṇa, en contraposición al trabajo material. Se afirma que incluso un modesto comienzo en el servicio a Kṛṣṇa no se pierde y no encuentra obstáculos en su desarrollo. A diferencia de las actividades materiales, donde el fracaso implica una pérdida total, cualquier obra emprendida en el proceso de conciencia de Kṛṣṇa tiene un efecto permanente, independientemente de si se completa o no.
La proposición de Arjuna de no pelear se basaba en la complacencia de los sentidos. Olvidando su deber primordial, quería dejar de pelear, porque creía que si no mataba a sus parientes, sería más feliz que si disfrutaba del reino después de conquistar a sus primos y hermanos, los hijos de Dhṛtarāṣṭra.
Que todo se debe realizar por el bien de Kṛṣṇa constituye el estado de conciencia trascendental; así que no hay ninguna reacción de actividades materiales. Aquel que actúa por su propia complacencia de los sentidos, ya sea en la bondad o en la pasión, está sujeto a la reacción, buena o mala.