En esta prédica titulada: Devastación Progresiva, analizamos que a través de las plagas mencionadas en Joel 2:25 hay una devastación poco a poco, que afectan tanto el crecimiento espiritual como material. Se destaca como la falta de obediencia y cuidado puede traer consecuencias negativas, como la oruga que impide el desarrollo, el saltón que desnuda, el revoltón que destruye los frutos y la langosta que arruina las cosechas. Se concluye con la importancia de clamar a Dios para restaurar los años perdidos y ser restaurados en todas las áreas de la vida.