Al día siguiente Juan vio a Jesús que se acercaba a él, y dijo: «¡Aquí tienen al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!
Juan afirma una vez más no ser el Cristo que había sido esperado por muchos años.
Juan el Bautista proclama que Jesús es aquel que viene a Salvar , de su plenitud tomamos todos y gracia sobre gracia.