Los libros son los juguetes más valiosos de las sociedades, con ellos cronstruyen puentes entre la cultura pasada y la que está por venir. Es por eso que los saqueos a las bibliotecas en tiempos de guerra, los incendios que han sufrido son una tragedia incalculable.
Rolando Kattan, uno de los poetas hondureños que posee, posiblemente, la mayor biblioteca de su país ha sido invitado por nuestro programa para que nos cuente sobre su biblioteca y su perspectiva de la labor que han tenido los libros en su éxito como poeta de orden mundial.
El Dato Rosa, nos trae una interesante información sobre libricidios en la historia de la humanidad y algunos otros venenos. En tanto Rosa Espinoza (que sigue con paradero desconocido) ha sido reemplazada por la IA. No será un encanto como ella, pero es más económica.
En el consultorio poético le preguntamos a nuestros seguidores , qué libros salvarían de sus bibliotecas y recibimos respuestas inesperadamente teológicas.
En la bitácora ruculista desvariamos con una serie de críticas sin sentido y enconos inmerecidos respecto al peso, valor económico y cuantitativo de nuestras bibliotecas quemadas por nuestros ojos cansados de releerlas.
Un poeta sin biblioteca es como un cerdo sin charco.
Importunados por el absurdo color de nuestra piel no aceptamos pedir disculpas por quiénes somos. No hay vergüenza en la genética de nuestro ritmo y menos de nuestra oscura poesía. Que se nos discrimine más bien por la norma y el color predecible de lo correcto. Encaramados en las confusiones de la esclavitud invitamos a Sofía Natalia Gonzáles Ayala , antropóloga experta en afrodesendecias, museos de la negritud y colorímetros de todo tipo para que nos explique la ética del racismo. Nos da cuenta de la iluminación y lo bueno, de la oscuridad y de lo malo, de todas esas cosas que ocultamos sin ser totalmente conscientes del dolor que acusa la normalización pictórica del alma.
Dado que al parecer Rosa Espinoza se ha perdido para no ser encontrada nunca , enviamos a uno de nuestros asalariados al desierto de Sechura en Piura a explorar Yapatera y a conversar con doña Mercedes, parte de un pueblo negro e idílico donde se originaron las Cumananas y el Tondero, un lugar que casi no existe en los bosques de algarrobo del norte peruano donde un día fuimos felices.
En Poesíasinvergüenza, a falta de opiniones sobre discriminación de nuestra audiencia , leemos un poema de Luis Silva "Cuti" del Brasil que balancea nuestra alma negra hacia reflexiones insospechadas. Todos somos de alguna forma "Zumbi de los Palmares", cimarrones sin casa y libres de cualquier tipo de esclavitud.
En la Bitácora Ruculista damos fe a cuentagotas de nuestra poca consciencia sobre la negritud y también de su enorme aporte cultural. Chinos, indios, negros, mulatos , cholos , saltapatrases, cuarterones, zambos, mestizos, todos los colores modestos que miramos con extrañeza la justicia.
No nos quieran más por la blancura de nuestros dientes. No nos elijan por la luminosidad de nuestro inconsciente. No nos elijan por nuestro color de piel. Bajo la ceguera del racismo ningún poeta existe. En el paraíso negro, vestimos la felicidad irrepetible todas nuestras prendas color piel. No olvides la sonrisa, para que se sienta una voz más amigable, fresca y de mentira.
No es que la poesía se confunda, se distancie o necesite de la música. O que la música desborde sus límites y se vuelva, finalmente, poesía. En este capítulo de pensamientos desorejados y versos sordos nos preguntamos por esa hermosa relación entre sonidos y palabras e invitamos al grupo chileno Lux Violeta, especialista en musicalizar poemas o quizá en ponerle poesía a su música. Sin más palabras escuchamos en un unplugged especial para nuestro programa ruculista.
Rosa Espinoza está clandestina, ¡una vez más! Sus celadores han anunciado su fuga del campo de reeducación por lo que aparentemente era un túnel o una madriguera. Esperemos que siga reportándose desde donde esté, por lo menos, esta vez mandó un escueto poema de pausa o despedida.
En Poesíasinvergüenza analizamos un poema de alto nivel musical de la compositora y jazzista chilena Luz Cuadros que nos deja pensando en el eco del silnecio.
En la Bitácora ruculista terminamos un poco afligidos de no tener más oído que la voz de nuestras consciencias y aludimos a grandes músicos poetas y poetas musicales.
Nunca hemos tenido una casa, es cierto. Pero es justamente la ausencia del hogar la que nos ha hecho propietarios del mundo. Si no hay casa basta con cerrar los ojos para inventarnos una. Así recreamos en este capítulo Solentiname, patria idílica de poetas, artistas y campesinos. Nos dedicamos a cultivar el campo , las ideas y el ensueño. Como no sabemos realmente cómo hacerlo sostenible , invitamos a Jaime Quezada , quizá el único sobreviviente y real habitante de ese idilio. Quezada , tan cercano a Ernesto Cardenal, fundador de Solentiname , nos cuenta detalles escabrosos de cómo es vivir en el paraíso.
El Dato Rosa llega cargado de realidad y Rosa Espinoza nos demuestra que las mejores residencias literarias son siempre impuestas y forzadas. No hay Solentiname que se parezca a una prisión ni Dovstoieski que se haya ganado una beca de creación .
El consultorio poético , nos demuestra lo desesperada que está nuestra audiencia por hacerse de una comunidad poética que los motive a escribir en solidaridad, se habla del líquido amniótico , de la isla de la fantasía, de todos los lugares que el dinero puede comprar. La residencia lotería ideal se parece a una tarjeta de crédito.
En la bitácora Ruculista ideamos estados cuya jurisprudencia se basa en la palabra y en definir cuál sería el espacio deseable para devolverle cierta dignidad a las letras que nos nombran, una comunidad hecha para escribir , para hacer el amor , para crear, tal como lo fue la biblioteca de Alejandría, la isla de Hydra que fundara Leonard Cohen o el desierto de Sechura donde todos los fantasmas de ítaca entierran su corazón. Un lugar como el paraíso que Dante nunca conoció . ¿Dónde ubicaremos la residencia ruculista ? ¿Será acaso en una isla o el pétalo de un amor ? En la ilusión geopolítica de todos esos lugares que ya han desaparecido y tercos perduran en el recuerdo. No importa. Lo importante es inventar un lugar para seguir existiendo tonales, corvos , felices
La admiración no existe sin reconocimiento y el reconocimiento no vendrá por cuánto te cultives , ni los méritos humanistas que creas merecer. La condición humana parece resumirse a un like. Así de dura y terrible parece la época vacía que nos ha tocado padecer.
En lo efímero de la vida, siendo víctimas y activos miembros del consumismo y la validación nos encontrábamos hasta que Silvia Guerra, poeta, académica y editora uruguaya aceptó ser nuestra entrevistada esta semana para darnos cierta esperanza. Le preguntamos si la voracidad del consumo por redes sociales también afecta a la contemplación poética y en particular si sabría cómo ayudarnos a crecer en nuestras redes sociales ruculistas para alinearnos con las nuevas formas de expresión y canalización del arte en nuestros días .
Dado el penoso devenir de nuestro Instagram y la bajísima interacción de nuestros seguidores, Rosa Espinoza llega con su Dato Rosa a darle forma estadística a nuestros mayores temores y nos explica cuál es el alcance de nuestro programa y el porqué de nuestros fracasos virales.
En Poesíasinvergüenza, Carlos Perroti desde Argentina nos manda un poema que se somete sin su consentimiento a una disección desesperada para hacer su poema instangrameable.
En la Bitácora Ruculista analizamos el fenómeno de la poesía de teléfono, refiriendo a poetas-influencers líderes en arte, seguidores y opinión. No sin envidia, nos adentramos en este episodio a buscar darlo todo por un like.
El amor es un like, el abandono es un like, la traición es un like, la admiración también y el ego, ni hablar. Pero que la santa poesía, no se rinda ante la superfluea obstinación de hegemónico algoritmo de mentir.
Sin la voluntad de la exactitud, la muerte no mata a nadie. Vistiendo de luto nuestros pensamientos finales y seguros de que la única certeza en la vida es la muerte, nos adentramos en este programa fúnebre que habla de la relación con la muerte y la trascendencia poética , de los riesgos de transitar los bordes del abismo y de caernos a veces dentro de él. Dada nuestra oscura tendencia decidimos invitar al teólogo y religioso jesuita experto en la muerte Mario Inzulza que nos trae luz en las tinieblas de nuestras dudas.
Rosa Espinoza preocupada más que por la vida o la muerte , confiesa su inclinación por la transcendencia y la posteridad. Será por eso que el Dato Rosa de esta semana se basa en la numismática que elige los rostros de poetas para perdurarlos en el tiempo a través de un valor monetario.
En el confesionario poético no se nos ocurre nada mejor que pedirles a nuestros seguidores que escriban sus epitafios y analizamos algunos otros de escritores que dejaron lo mejor de su talento sobre sus lápidas .
Finalmente, en la Bitácora Ruculista hacemos gala de nuestros vastos conocimientos del más allá, polemizamos sobre el Samsara , el tránsito de las almas, del judío errante, y la vigencia de las mallquis incas.
Esperando que por este programa se nos otorgue algún premio consuelo en el paraíso de las valquirias y evitemos a toda costa el castigo que seguramente ya tiene nuestro nombre en el infierno de Dante, nos despedimos dedicando este programa a nuestra amiga Amanda Durán que se nos adelantó en esta exactitud tantas veces injusta que es el fin de nuestros días . ¡Buen viaje Amanda, ya nos encontraremos pronto!
Desde lo alto de la montaña, camino al templo taoísta donde pasaremos el resto de nuestros días, hacemos una parada en el palacio imperial donde encontramos más preguntas que respuestas en medio de la contemplación. Dado que por más que intentamos no le encontramos sentido a nuestra alicaída mirada poética, fuimos en busca de alguna esperanza en la vasta poesía china. Así, desde Beijing, el profesor, académico y traductor Sun Xintang se compadece de nuestra sed de saber y nos regala una pincelada de la gigantesca tradición de la poesía clásica de su país, pero también nos informa con mucha actualidad de cómo es ser poeta hoy en China. Noshabla de la poesía “de la cintura para abajo”, de los movimientos vanguardistas, de la caligrafía y de la libertad y nos sorprende contándonos que l@s poetas en el lejano oriente no se mueren de hambre, así como que todo funcionario y político debe ser, ante todo, poeta antes de ejercer un cargo público.
De China no sabemos nada es cierto, pero parece que tiene mucho que enseñarnos.
En ese tenor, Rosa Espinoza, confiesa su ignorancia respecto a la poesía China y le agradece a este humilde programa la oportunidad para expandir su acidez estomacal y crítica con respecto a la poesía de otras latitudes. En un acto dejusticia revalora la poesía china hecha por poetas mujeres de ese país y sienta, casi por acto reflejo, una posición ecofeminista de la actual situación.
En Poesíasinvergüenza recibimos el sulfúrico correo de Francisca Olelovo que, desde Coyhaique, nos manda un mensaje lleno de quejas y reclamos que acogemoscon sabiduría zen gracias al milagro de su estupendo poema. Más prestigioso que escribir, es dibujar los poemas y usar la caligrafía como una espada.
En la bitácora ruculista, terminamos leyéndonos el horóscopo chino decepcionándonos la más de veces con nuestro destino oriental. Entre la espiritualidad china, divagaciones sobre el amor y la muerte, el azar, los grandes sinólogos y la carne mongoliana, terminamos este capítulo que rinde homenaje y pleitesía a una de las mayores poéticas del mundo.
En un arranque desesperado por encontrar nuestro mayor brío artístico, la máxima destreza poética y la ambición desmedida de nuestra malentendida estética, llegamos a la conclusión de que solo un exorcismo podría aliviar nuestra sed de poesía. Poeta es quien encarna la posesión, aunque no sepa si es demoniaca o divina, mística o maldita. Así, a punto de la excomunión, decidimos invitar a una limeña experta en exorcismos: Rocío Limo, quien desde la fuerza de su dramaturgia y su mirada artística nos cuenta cómo ha trabajado las posesiones desde sus escritos teatrales y artísticos. Nos invita a analizar su obra "María Pizarro", inspirada en la primera mujer en ser exorcizada en el Perú a causa de sus ganas de aprender a leer y de un incontrolable deseo sexoidentitario por querer ser ella misma.
Por su lado, la bautizada Rosa Espinoza con los ojos en blanco trae en su Dato Rosa estadísticas y métricas sobre exorcismos en la historia de la humanidad, aludiendo a fuentes como las legiones de curas especializados en ese arte, las películas de terror de los 70s´ y su propia experiencia como posesa.
El Consultorio Poético se vuelve, más bien, un Confesionario Poético, dado el tema que nos convoca y mandamos al público que nos ha escrito a la canonización o, de plano, al infierno.
En la Bitácora Ruculista tratamos de tender un canal de libertad para el demonio. Nos adentramos a conversar sobre el mal sin asco ni piedad. Todos los humanos se desbordan. Todos los cuerpos se pervierten. Las fuerzas que nos controlan hacen de estas discusiones un exorcismo en sí mismo. ¿Qué sería del Fausto sin las posesiones , qué de la Condesa Sangrienta sin esos impulsos, qué de Paganini sin ambas?
La historia de las posesiones es una historia de cuerpos y, por lo tanto, una historia de géneros. La historia de la posesión poética está por verse.
Terminamos con un accidentado Bonus track: ya que estamos posesos, Belcebú hace de las suyas y juega dejándonos al descubierto con comentarios lamentables fuera de lugar, del programa y de cualquier paraíso.
Si es verdad que somos herederos estéticos de nuestro nombre y que esclavizarnos a la autoría de nuestros versos será nuestro legado, lo mejor será borrar cualquier rastro de él para preservar su silente inexistenciaen el poema. Así de perdidos estamos y, por tanto, empezamos este programa ruculista invocando a un autor que de un solo hachazo desapareció su nombre de su obra publicada, nos referimos al poetay abogado Gregorio Jusid, amigo y discípulo de Juan Luis Martínez, quien le enseñó los gajes de ocultarse en el poema, dado que fundamentalmente, nadaexiste.
Rosa Espinoza, bajo la presión de una meditación profunda, nos trae un importante dato sobre el primer caso de plagio en la historia de la Grecia antigua y nos cuenta cómo asíel plagiario es quien usa esclavos ajenos.
En nuestra sección poesía sin vergüenza, leemos un poema de la reincidente Teresa Arnaiz , que nos lleva a tomarnos la crítica de salón radicalmente en serio y terminamosen una bifurca al peor estilo del lumpen literario : ¿Interesa la obra y no el autor? ¿la biografía hace mella en el ejerciciopoético? Entre teoría literaria y postulados de interpretación no llegamos a ninguna verdad confiable que aporte al canon, pero por menos es una discusióntierna.
En la bitácora ruculista, continuamos en la competencia de aplausómetros para castigar todo argumento, hablando de la fuga del yo, la anonimia, el rastreo de las metáforas obsesivas de un autor y la pretensión de enormes poetas inclinados a la desaparición de su nombre. No hayoriginalidad plena que le haga sombra al narcisismo poético.
Edición técnica: @pabloFante
Auspicia: @breakingwork
Aludiendo al proverbial dicho que canta: “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”, iniciamos nuestra quinta temporada ruculista contra todo pronóstico y totalmente renovados.
🌿En este nuevo ciclo presentamos un programa fresco, innovador y esperanzado con nuevas secciones y afilados comentarios, sacudiéndonos de tópicos repetidos y lugares comunes que nuestra audiencia siempre nos ha criticado.
👅En el marco del radicalismo camaleónico que nos caracteriza, nos olvidamos para siempre de seguir otorgando el Premio Nobel Alternativo para darle paso a la sección de entrevistas: “Esta lengua es mía”, y qué mejor para darle curso que invitar a Francisco Olivari, ingeniero en biotecnología molecular 😶🌫️ y músico para que nos hable de lo que está dominando la discusión científica y callejera, la psicodelia. A través de ella, buscamos nuevas señales de ruta, deseando que los neurotransmisores encuentren alguna luz al final del túnel con la injerencia de hongos, ayahuasca y plantas sabias que han estado al alcance de la mano desde tiempos inmemoriales en la vida de los seres humanos para lidiar con la ansiedad, la depresión y los intríngulis poéticos, que suelen hacer de los artistas seres impredecibles, desdichados, sufrientes o lunáticos.
🥀Rosa Espinoza vuelve con su Dato Rosa para hablarnos del valor de la hierba mate y el tabaco desde el campo de reeducación donde la trasladaron directamente del penal donde ya no pudieron soportarla.
Así mismo, inauguramos la sección Consultorio Poético, un espacio democrático y hegemónico donde recibimos problemas poéticos de la gente que no tiene nada mejor que hacer que escucharnos y buscar ayuda literaria para problemas metafísicos y cotidianos.
Por último, la Bitácora Ruculista continúa más intransigente que nunca. Discutimos sobre los efectos de la psilocibina, invocamos a María Sabina, la sacerdotisa de los hongos, para terminar a merced de los desvaríos de la psicodelia y el valor psicótico de las palabras.
Larga vida al ruculismo y mejor si es en medio de un viaje.
Edición técnica: @pablo_fante
Auspicia: @breakingwork_cl
Tratando de alejarnos, lo único que logramos es acercarnos más, aunque no siempre sepamos si es hacia la oscuridad o la luz. Con ese viaje al interior de la caverna, estrenamos el último capítulo de esta temporada y, en el mejor de los casos, el último.
Para adentrarse en esa peripatética exploración, invitamos a la valiente caminante y poeta de grietas subterráneas, Ana Lissardy de Uruguay. Ana nos cuenta de su claustrofobia superada al interior de las cavernas y de sus nacimientos literarios en dirección a la luz espeleológica.
En Poesíasinvergüenza analizamos un poema de Luz Acevedo, quien nos manda unas décimas maravillosamente homoeróticas y polisémicas que, sin mayor talento ni decencia, terminamos destrozando con nuestras lecturas impostadas, falsas y competitivas.
En el dato Rosa , Rosa Espinoza nos trae una historia de ficción y mucho látigo cargado de deseos bajos por ganar protagonismo desde su confinamiento eco-primitivista.
Nuestros poemas sin mapas se han extraviado para siempre en las cavernas que aún no conocemos y tratamos de hacer una bitácora ruculista absurda sobre aquello.
Así como una madre sabe todo lo que nos pasa al interior, así las cavernas también saben en lo más profundo de la tierra cuál es la salida al extravío de lo que parece una oscuridad sin fin.
Busca la salida que te mereces, Ruculista; aunque pierdas la esperanza en ese atisbo llamado cruel y tiernamente, 'imposible'.
Guiados siempre por el devenir y las caminatas esperanzadoras, nos entregamos a la reflexión desde los recobecos de la urbe, con los pies en el asfalto y la mirada poética perdida en el tránsito y en el ruido cosmopolita de la ciudad invitamos a David Añiñir, poeta mapuche, pero también urbano, punk, vecino de la pobla, ambulante y observador agudo de la realidad y el arte. Un poeta mapurbe, como él mismo se define.
En el dato rosa, Rosa Espinoza nos deja con una reflexión futurista sobre los avances del urbanismo, la población citadina y la creación poética en esos azares.
En Poesíasinvergüenza, Ignacio, desde su casa rodante nos manda un poema sapiensal con matiz espiritual y porrístico.
En la bitácora ruculista respondemos a las preguntas sobre el urbanismo poético y las limitaciones de la ciudad. Es decir , puras divagaciones campestres y cantinflescas que pasan por el concretismo brasilero y los poemas sobre las ciudades.
Después de pensar en la poética del cemento nos inclinamos a escribir desde el campo, el verde y la falta de domesticación citadina
Como si este programa hubiese salido de una lata vacía de algún pegamento adictivo, sea neoprén, terocal o similar, publicamos un nuevo y laterísimo episodio Ruculista con el bostezo en la boca y sin ningún ánimo de hacerle gracia a nadie. Por fortuna y para no petrificarnos de aburrimiento, invitamos al poeta y filósofo Daniel Ramírez, residente en Francia. El filósofo nos habla sobre la luz que debería seguir irradiando la caverna de Platón, reivindica el valor de los sofistas y de la compleja verdad de l@s influencers en clara afrenta al no pensar.
En Poesíasinvergüenza, como era de esperarse, no recibimos ningún poema y, por tanto, analizamos una canción de un grupo argento llamado 'Supermerk2' que la conosureña Rosa Espinoza nos exige que analicemos casi como una extorsión. Escudriñamos el sentido del aburrimiento, la composición vacía y el laterismo como tema supremo de interés carcelario y cultural.
En la bitácora ruculista evidenciando el hartazgo de percibirnos vivos, formulamos una adivinanza indescifrable a falta de ingenio poético.
Ruculista, si esta vida llena de fotos predecibles en la que has convertido tu legado ya no te convence, viaja hacia ti mism@, duerme en tu hamaca, abúrrete como nunca, ama con todas tus fuerzas el sueño que apenas recuerdas y, quizá, en ese atajo hacia la nada, tapes la caverna del bostezo inexplicable de existir.
¿Qué le deparará el destino a las vidas sin punto de retorno? ¿Qué suerte les devendrá a quienes ya no tienen nada que perder excepto la noche que aún no ha terminado? Basados en estas elucubraciones pensamos, como Marx, que toda historia se escribe dos veces, la primera como tragedia y la segunda como farsa. Es por eso que esta semana otorgamos el Premio Nobel Alternativo a Acoyani Guzmán poeta y tarotista , que, en un acto de desprendimiento y búsqueda desesperada de la verdad accede a leernos el tarot. En vez de preguntas literarias preguntamos sobre el amor, los enemigos, el dinero, la incertidumbre y el hedonismo.
Por si fuera poco, en Poesíasinvergüenza, con total descaro escogemos un poema del gran poeta y narrador Isaac Goldemberg quien en otrora tiempo nos mandó como regalo ese libro inédito para nuestra solaz y que ahora sin sangre en la cara compartimos con ustedes.
En la bitácora ruculista nos leemos la suerte entre gitanos aludiendo a datos rebuscados para maquillar nuestro sórdido destino.
El dato Rosa llega en un incómodo último momento, para reivindicar la inclinación femenina del Ruculismo.
La vida es una eventualidad del tiempo y la muerte la más larga de las eternidades.
La palabra poética , así como la vida, es un premio que se nos da y a la vez se nos quita. Ese es el caso de nuestro Premio Nobel Alternativo de este programa, el historietista, narrador y poeta Juan Acevedo que desde el Perú nos trae la prueba de que toda realidad supera a la ficción, sobre todo con su caso. La Casa de la Literatura le otorga un premio, se anuncia , se promociona y después sin mayor explicación se le retira porque su arte no es conveniente para el gobierno. ¿Cuándo el arte es suficientemente peligroso e incómodo para vetarlo?
Basados en ese principio hablamos desde la desazón de no haber sido premiados nunca y solo para poner el parche delante de la herida, declaramos que nosotros tampoco aceptaremos ningún premio jamás (hasta que nos llegue).
En el Dato Rosa, Rosa Espinoza nos trae la historia de los premios rechazados de Idea Vilariño y nos da cátedra sobre la consecuencias de tomarse el arte en serio.
En poesía sinvergüenza transformamos un comentario de Javiera @labicivoladora en poema gracias a la trampa de la inteligencia artificial.
En la bitácora ruculista justificados lo injustificable y conversamos sobre los premios que nunca nos serán dados.
De la imagen y la palabra sale un arte mestizo, de los premios y los vetos sale un poema que perdura.
Si el amor siempre te es negado, si tu actitud es casi tan inadecuada como tu apariencia, si tú tampoco sabes enamorar, Ruculista, no desesperes, este programa es para ti.
Con la asistencia tecnológico-romántica de la poeta española Silvia Veloso, descubrimos en este capítulo cómo dotar de sentimientos a las máquinas, tal como dicta su brillante libro, "Sistema en caos y máquina, la educación sentimental de la inteligencia artificial". Hablamos de cómo es casarse con un holograma o de cómo apagar con un botón la angustia que el amor natural produce en nuestra humana ansiedad por lo inalcanzable.
En Poesíasinvergüenza, Zurco Salcín, nos manda un poema crítico, críptico y caóticamente bello que nos hace pensar en si el amor por las máquinas será el único futuro que le deviene a l@s poetas.
En la bitácora ruculista analizamos pros y contras de emparejarnos con la inteligencia artificial y, conscientes de que terminaremos con deudas y el corazón destrozado, nos alegramos por el guiño metálico que la máquina nos hace de vez en cuando.
Si el amor no es imposible, es simplemente maquinal, rutinario, dominguero y finito.
En busca del algoritmo de la vida, nos nutrimos de la soledad de no ser correspondidos realmente por los errores amorosos de las máquinas. PD: y como si no pudiera ser peor, Rosa Espinoza se perdió en un silencio algorítmico que nos da la seguridad de estar haciendo todo mal.
En la hibridez idiomática, no sabemos quiénes somos. Hablamos todas las lenguas y ninguna. Amamos en un idioma pero odiamos más en otro. Cada palabra es pensamiento y todo pensamiento es lenguaje. En esta malsana maraña idiomática nos encontramos con la belga Camille Berleur a quien decidimos otorgar el Premio Nobel Alternativo, acaso para sacarnos la espina que traba nuestra lengua. En Camila, una francófona-hispano-chileno-parlante profesional, basamos nuestras dudas respecto a qué diantres es zambullirse en las derivadas de una lengua.
El dato Rosa, plagado de una solidaridad idiomática chilensis, nos azota con una cátedra sobre prejuicios lingüísticos que, además de dejar llagas en la piel, empieza a hacernos sangrar el pensamiento respecto a qué lengua es pobre , rica, mediocre o funcional.
En esos intríngulis, y por acción lectocasuística de Poesíasinvergüenza, encontramos el poema de Bruno Rodríguez Cuello que nos mandó (no se sabe cuándo ni por dónde) un poema que no podemos dejar de comentar en medio de una batalla campal sobre contenido y forma.
En la bitácora ruculista confesamos que nuestro uso culto del lenguaje no es más que una triquiñuela baja para ser aceptados medianamente en un sistema prejuicioso, corrupto y lleno de humanas inseguridades del lenguaje.
Si el prejuicio pudiera traducirse en todas la lenguas significaría silencio, empatía y eviterna incomprensión.
El fanatismo se confunde con la obsesión y la obsesión, muchas veces, con la pasión. Así el Ruculismo se declara fanático de su propia ceguera, de pasiones y obsesiones inalcanzables, desde el trilladísimo fútbol hasta la cetrería. Es por eso que esta semana invitamos a Patricio Se, poeta y editor argentino que, por el contrario, alcanzó con éxito el anhelo colectivo de rendirle un homenaje fanático a Roberto Bolaño con la antología 266, entre un grupo de justamente 266 autores del mundo. A pesar de ello, Patricio nos cuenta sobre su antifanatismo por Bolaño y sus reparos con las obsesiones.
En el dato Rosa, Rosa Espinoza con voz aguardientosa de tanto apoyar a las barras bravas zurdoambientalistas, nos da cátedra sobre los fanfics novelescos, en los que la fanaticada da cuenta de nuevos finales, crossover entre autores, personajes y las más ingeniosas creaciones, al margen de la crítica literaria.
En Poesíasinvergüenza, recibimos el poema del fanático ruculista Alan Muñoz-Olivares, quien desde Concepción nos manda un poema en el que nos restriega que no hay poesía alguna que cure el mal de amor.
En la bitácora ruculista, al borde del delirio por hambre, declaramos al Ruculismo una secta de inspiración mesiánico-milenarista y aires carismáticos.
No perdemos nada intentando remontar nuestras horas bajas con cualquier fe que convierta nuestra pasión en ciego fanatismo.
La libertad del cuerpo femenino atormenta cada prejuicio simbólico de este programa. Sin saber cuánto goza un cuerpo femenino cuando goza o cómo se expresa el cuerpo de una mujer cuando escribe poesía, nos abocamos a indagar y elucubrar respuestas tontas. Es por eso que invitamos a la poeta y académica española María Ángeles Pérez López para que nos dé luces sobre este y otros temas de su especialidad, por ejemplo, la literatura chilena, la familiaridad entre Huidobro y Nicanor Parra o su experiencia con el cuerpo del poema desde la filología.
Siempre preocupados por la evolución caverno-literaria de nuestras letras, hicimos una gestión medio artística, medio turbia para que el gendarme de turno, le pase un teléfono a Rosa Espinoza, recluida en prisión más como Dostoievski que como Ana Frank para que nos traiga un dato desde el ecofeminismo y su maltrecho cuerpo en cautiverio.
En Poesíasinvergüenza y desde Alemania recibimos los versos de Franziska Hennemuth que nos deja con ganas de descubrir más sobre su trabajo literario y de saber si realmente existe o es un pseudónimo de alguien que nos tima.
En la bitácora ruculista no podemos más que rasgarnos las vestiduras con las palabras que designan la anatomía íntima del cuerpo femenino y su poder sempiterno sobre nuestros prejuicios.
Seguros de que la inteligencia artificial nos censurará el programa, abogamos por nuestra propia inteligencia para rendirle culto al cuerpo de todas las mujeres ruculistas. Ya era hora.
🐖El cuerpo es un tiempo físico y espiritual sin final. Cada dolor o satisfacción queda grabado en su memoria genética. Basados en estas trasnochadas elucubraciones invitamos a Fabrício Corsaletti, uno de los más vigentes poetas brasileros, para que nos dé sus apreciaciones sobre la fisicalidad que significa escribir, caminar y mirar.
🥀En el devenir del cuerpo, Rosa Espinoza parece haber encontrado su destino en una celda donde no hace más que observarse, y, por tanto, trae un dato fino y elevado, donde nos falifica 👊 y alecciona en estados impensados por los que pasa el cuerpo poético.
🙈En Poesíasinvergüenza, Camila Segovia Andías, nos manda un poema tan corpóreo como sensual que nos despierta el entusiasmo por sentir el elevado espíritu de lo inefable.
🛩️En la bitácora ruculista divagamos sobre ideas absurdamente heteronormadas de los cuerpos propios y ajenos al borde del pecado y la vulgaridad, siempre desde una mirada torpemente masculina.
Sin nada que añadir, nos quedamos con ganas de descubrir que diría nuestro páncreas de tener voz poética, femenina y publicable.