Fátima es de Nicaragua, desde joven se dedicó a la literatura. Publicó un libro que fue premiado, lo que le abrió diferentes oportunidades. Después del estallido social del 2018, y al verse envuelta con diferentes movimientos estudiantiles y ser una cara conocida hablando de la situación de su país internacionalmente, buscó asilo en México por motivos de seguridad y continuó con su vida académica. Aceptar la idea de que por el momento no puede volver a su país, no ha sido fácil para ella, pero esto no le ha impedido seguir articulada con diferentes medios culturales y de comunicación de Nicaragua.