
Muchos de nosotros creemos que aquellas personas que hacen el bien día con día, que van por la vida siguiendo sueños y propósitos de forma íntegra y en armonía, ayudando a los demás sin hacer daño a nadie, merecen siempre los mejores resultados y la buenaventura de la vida en proporción y por efecto de todo lo bueno que han producido y logrado a su alrededor, sin embargo, nos encontramos con que normalmente esto no suele suceder así y por lo cual nos parece complicado comprender por qué a las personas que tienen por práctica hacer cosas buenas experimentan y adolecen de momentos crudos y desequilibrantes en la vida que no igualan ni retribuyen toda la bondad y entrega que han dedicado en su vida.
Para comprender la razón de esta pregunta, en este capítulo abordamos la reflexión y el análisis del por qué le pasan cosas malas a las personas buenas.
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Astrid Gorriño Gallardo | Coach de Vida, Ejecutivo y de Equipos