Alli tiene trastorno de la personalidad antisocial. Desde los 5 años su entorno notó que algo en ella funcionaba distinto; los maestros le recomendaron a sus padres que la llevaran a un psicólogo. Corría el año 1994 y el sistema de salud estaba poco preparado para atender consultas de salud mental. Al principio fue diagnosticada con bipolaridad y recién en su adolescencia se obtuvo el diagnóstico correcto -y final-.  En esta entrevista recorremos su día a día, su forma de vincularse con los otros, su relación con el amor, la familia e inclusive su trabajo. Su relato busca desmitificar algunos prejuicios hollywoodenses sobre la condición, pero no deja de describir con una honestidad brutal los actos no tan buenos que ha cometido para con otras personas.