En nombre de poder con todo, nos olvidamos de poder con nosotros mismos.
Desterramos palabras necesarias: no, frustración, cansancio…
Pero sin ellas, también desterramos la humanidad que nos habita. ✨
La ira y el resentimiento nublan el alma.
Soltar no siempre es fácil, pero el olvido tiene su propia sabiduría: se lleva el peso del dolor y deja espacio para respirar otra vez. ✨
No sé en qué momento dejamos de mirar las cosas con asombro.
Todo se volvió una urgencia. ⏳
Pero aún existe ese espacio profundo donde cada gesto puede transformarse en un ritual,
donde lo cotidiano se vuelve significativo. ✨
Hay momentos en que el alma necesita una pausa…
Pero no cualquier pausa, sino una que cure. 🌿
Una que te invite a respirar hondo, a sentir la belleza de lo simple, a volver a vos. ✨
No es lo mismo estar solo que sentirse solo.
Estar solo puede ser una elección; sentirse solo, una herida que se respira.
La verdadera soledad no es la falta de personas, sino la ausencia de sentido 🌟.
Creer no es ingenuidad, es un acto de valentía 💪.
Es mirar más allá del horizonte 🌅, sostener lo invisible ✨ y decir sí donde otros solo ven vacío. 🌌
En un mundo acelerado, lo hecho a mano tiene el valor de lo auténtico. Cada pieza guarda amor 💖, paciencia ⏳ y la huella irrepetible de quien la crea. Volver a lo hand made es volver a lo esencial 🌿.
Ser diferente no es un error ❌, es un regalo 🎁.
Es tener el coraje de caminar con tu propio ritmo 🥁, sin pedir permiso, sin compararte.
La verdadera fortaleza está en abrazar lo que te hace único 🌟.
En un mundo donde todo caduca, lo esencial permanece: el tiempo, el presente y lo que sembramos en otros. 💫
La vida no tiene fecha de vencimiento cuando aprendemos a habitarla plenamente. 🌿
🎙️ Nuevo episodio de Vivencias con Andrea Calvete: Vivir sin fecha de vencimiento
Tu sombra pesa y puede condenar a otros a vivir en la oscuridad ⚫…
Pero incluso en la noche más cerrada, siempre hay una chispa de luz: amor, solidaridad y empatía que iluminan el camino. 🤝❤️
Ordenar no es callar la vida ni quitarle movimiento 🌱.
Es un acto consciente 🙏, una elección entre lo que nos da fuerza y lo que nos drena ⚡.
Es dejar ir lo que ya no late en nosotros 🖤, para dar lugar a lo nuevo que quiere nacer 🌸.
Inmortalizar el momento es salvarlo del olvido 🕰️.
Es rescatarlo de la fugacidad para transformarlo en fuerza, en motor de vida 💫.
Nada queda inmortalizado al azar… siempre hay una razón profunda que lo graba en el alma ❤️.
Llorar no es rendirse… es recordar lo amado, lo vivido, lo perdido 💔.
Cada lágrima encierra fuerza, memoria y dignidad 🌈.
Es en el llanto donde muchas veces recuperamos lo que creíamos haber perdido 💫.
Lo que me gusta de vos no siempre tiene explicación… y quizás ahí esté la magia ✨.
No se trata de entenderlo, sino de sentirlo 💫.
Ese “algo” que nos atrae sin motivo, que simplemente es 💭.
En tiempos inciertos, cuando el mañana parece desdibujarse 🌫️, aún hay algo que persiste: la utopía 🌈.
Hoy te invito a reflexionar 🤔, a imaginar lo posible incluso en lo que parece imposible 💭.
Hay una llama que no se ve 👁️🗨️, pero arde en lo más profundo 💓.
Es la llama invisible de la espiritualidad 🧘♀️💫, capaz de liberar fuerzas ocultas 🔓 y revelar lo que nos habita 🌌.
Hoy te invito a encenderla 🕯️.
¿Estamos perdiendo nuestra capacidad de contarnos? En un mundo saturado de ruido, donde cada vez cuesta más escuchar y ser escuchados, el relato empieza a resquebrajarse. Sin escucha no hay relato. Y sin relato no hay comunidad. Y sin comunidad… ¿quiénes somos?
Hay gestos que no hacen ruido, pero hablan fuerte.
Respetar al otro en su silencio, en su historia, en su herida…
Ese es el arte sutil de amar sin invadir.
No se entrena en gimnasios ni se mide en rutinas, pero sostiene lo más profundo de lo que somos.
Ese músculo invisible que vibra cuando reímos, lloramos o simplemente… sentimos.
Hay días que parecen vacíos, pero basta un gesto, un sonido o una pequeña belleza para transformarlo todo. Porque a veces, lo más profundo se revela en lo más simple. ✨ ¿Y si hoy fuera uno de esos días?