
«Doy gracias al que me revistió de poder, a Cristo Jesús nuestro Señor,
porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio, habiendo yo sido
antes blasfemo, perseguidor e injuriador; mas fui recibido a misericordia
porque lo hice por ignorancia en incredulidad; y la gracia de nuestro Señor
fue más abundante con la fe y el amor que es en Cristo Jesús. Es palabra
fiel y digna de toda aceptación: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar
a los pecadores, de los cuales yo soy el primero. Pero por esto fui recibido
a misericordia, para que Jesucristo mostrase en mí el primero toda su
paciencia, para ejemplo de los que habrían de creer en él para vida eterna.
Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios,
sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén» (1a Timoteo 1:12-
17, RV-77).
#Amen
#vidanuevaencristomexico