Pierre Aronnax, su sirviente y un arponero canadiense entran en contacto con el capitán Nemo, en su navío submarino, el Nautilus. Recorren el mundo por el fondo submarino, en un viaje asombroso.
All content for Veinte mil leguas de viaje submarino is the property of audiolibros@fcalzado.es (Francisco J. Calzado) and is served directly from their servers
with no modification, redirects, or rehosting. The podcast is not affiliated with or endorsed by Podjoint in any way.
Pierre Aronnax, su sirviente y un arponero canadiense entran en contacto con el capitán Nemo, en su navío submarino, el Nautilus. Recorren el mundo por el fondo submarino, en un viaje asombroso.
La aventura de nuestros amigos a bordo del Nautilus llega a su final, y el profesor Aronnax comparte con nosotros sus pensamientos y sus emociones finales sobre tan impresionante aventura.
Los últimos acontecimientos protagonizados por el Nautilus al mando del capitán Nemo han impresionado tanto al profesor Aronnax, que decide sumarse al cualquier propuesta de evasión por arriesgada que pueda parecer.
Los restos del huracán arrastran al Nautilus hacia el Nordeste, y sus tripulantes pueden disfrutar de los fondos de las inmediaciones de Terranova y del Atlántico norte. En las coordenadas definidas por el título del capítulo, el capitán Nemo descubre a sus invitados la solución a un nuevo enigma histórico.
El tremendo golpe moral que reciben los tripulantes del Nautilus después del encuentro con los pulpos gigantes tiene su reflejo en el huracán al que se enfrentan en aguas del Atlántico occidental, y en incremento de la tensión entre el capitán Nemo y sus huéspedes forzosos.
El profesor Aronnax conoce bien las informaciones que hablan sobre pulpos gigantes, y tiene la posibilidad de poner a prueba las hipótesis lanzadas por los defensores de la existencia de estos monstruos.
Después de casi morir asfixiados, los tripulantes del Nautilus se recuperan y emprende viaje hacia el norte a través del Atlántico Sur, navegando por una zona rica en fauna submarina desde el extremo meridonal de sudamérica hasta la desembocadura del Amazonas.
El Nautilus queda rodeado de hielo por los cuatro costados a cuatrocientos metros de la superficie de mar, y su tripulación se ve abocada a morir por aplastamiento entre las grandes moles de hielo, o bien por asfixia por falta de aire.
En su camino de regreso desde el Polo Sur, el Nautilus sufre un percance por culpa de los icebergs que abundan en los mares que rodean la Antártida. En este caso, la situación que sufre el navío del capitán Nemo es mucho más grave que la sucedida en el estrecho de Torres.
Para poder determinar su posición exacta, y confirmar que el Nautilus ha alcanzado el Polo Sur, es necesario medir la altura del sol con el sexante al mediodía, pero las nubes parecen cubrir el cielo, impidiendo al capitán Nemo efectuar esa medición.
Aronnax y sus compañeros descubren la capacidad del Nautilus para desenvolverse entre los bancos de hielo que ocupan los mares que en torno al Polo Sur. La osadía de Nemo no parece tener límites, ya que parece dirigirse directamente hacia el Polo Sur, lo que asombra, una vez más, al profesor Aronnax y sus compañeros.
El Nautilus se dirige hacia el sur atravesando el Atlántico, lo que inquieta a los invitados-prisioneros del capitán Nemo. Durante su travesía, se encuentra un grupo de ballenas y cachalotes, a los que el capitán Nemo administra un sorprendente "tratamiento".
El Nautilus puede comprobar in situ el curioso efecto creado por el Gulf Stream en la superficie del océano Atlántico. También se sumerge hasta las profundidades abisales para observar la asombrosa fauna de la profundidad oceánica.
En esta ocasión el Nautilus recaba en una curiosa formación geológica en mitad del océano Atlántico, donde se proveía de energía materias primas para generar energía. El profesor Aronnax y sus compañeros examinan la geología, fauna y flora de ese curioso lugar.
El capitán Nemo no deja de asombrar a sus invitados. En esta ocasión, invita al profesor Aronnax a una nueva excursión submarina y nocturna, en esta ocasión sobre las ruinas submarinas de una continente desaparecido sobre el que se ha escrito mucho.
El Nautilus abandona el Mediterráneo atravesando el estrecho de Gibraltar, y se adentra en el océano Atlántico. Ned Land elabora un plan de fuga, y decide intentar ponerlo en marcha inmediatamente. Vivimos con el profesor Aronnax la ansiedad de los momentos previos al intento.
Una vez que abandona el archipiélago griego, el Nautilus atraviesa el Mediterráneo casi sin parar, dificultando la observación de la fauna y flora submarinas al profesor Aronnax y a Conseil, a la vez que frustrando las esperanzas de huída de Ned Land.
El Nautilus, en su singladura por el Mediterráneo oriental llega al archipiélago griego, y el profesor Aronnax tiene ocasión para descubrir las maravillas que encierra la fauna y la geología los fondos submarinos de las islas Cícladas.
El capitán Nemo no deja de sorprender a sus huéspedes, en esta ocasión al proponerles llegar desde el mar Rojo al Mediterráneo atravesando un peligroso tunel submarino desconocido hasta ese momento.
Para sorpresa del profesor Aronnax, el Nautilus se encamina hacia lo que parece un callejón sin salida: el mar Rojo. Sin embargo, los invitados del capitán Nemo se llevan una nueva sorpresa, pues lo que parece un mar sin salida resulta no serlo...
Pierre Aronnax, su sirviente y un arponero canadiense entran en contacto con el capitán Nemo, en su navío submarino, el Nautilus. Recorren el mundo por el fondo submarino, en un viaje asombroso.
