
Luces, música, pasarelas… y bajo la tela, los zombies.
La moda rápida nunca duerme: consume, desecha y vuelve a levantarse una y otra vez.
En cada prenda barata hay un alma cansada, un río contaminado, una historia que no se borra.
🧵 Una historia de horror sobre el precio oculto de vestir sin pensar.
Porque el verdadero estilo es el que no deja huellas en la tierra.