
Para Dios es tan importante lo que hacemos como lo que pensamos. Muchos de nosotros hemos sido influenciados por el sistema de este mundo aun en nuestra manera de pensar, conocemos la verdad y aun así seguimos esclavos de las corrientes de este mundo que por naturaleza son anti Dios.
La palabra de Dios dice en Proverbios
Pro 23:6 No comas pan con el avaro, Ni codicies sus manjares;
23:7 “Porque cuál es su pensamiento en su corazón, tal es él.” Aunque este texto está hablando del tacaño, de una u otra manera nos está diciendo que nosotros somos lo que pesamos. El gran error de nosotros que nos hace pensar como aquellos que no conocen a Dios es que pensamos que Dios no se preocupa por nuestros pensamientos.