
Lo más florido y floreado del audiovisual gallego se da cita anualmente en los Mestre Mateo. Cómo los Óscars, pero sin ostias. Bueno eso es lo que se esperaba, porque tuvieron la insensatez de dejarnos un espacio.
Dos horas de charlas inconexas con fotógrafos, actrices, escritores, actores, realizadores, sonidistas, gentes de producción...
Una noche grande. Con el nombre de Pedro en el recuerdo. En palabras de su gran amigo. "Que Putada"