
En este capítulo hablo de esas historias donde el corazón se acelera, pero uno igual cacha que no vale la pena perder la calma por alguien. A veces toca elegirse a uno mismo, aunque duela un poco (o mucho, demasiado aveces). También divago, porque así soy. Ponte cómode y acompáñame un ratito.
Y recuerden, el amor no tiene que doler !!! <3