
No llegó encapuchado: llegó programado. Y no traía un arma… traía un guion escrito por miles de manos anónimas.
Un muchacho, un pasamontañas, un cuchillo, y una frase que resuena como sentencia:
‘Escoria como yo tiene la misión de recoger la basura’.
Hoy, en Un Asesino Entre Nosotros, abrimos el expediente de Lex Ashton: el estudiante que llevó a la universidad un guion escrito por la soledad, la rabia y los foros del odio.
Esta no es solo la historia de un ataque… es la disección de un espejo roto: ¿qué hace que un joven decida convertirse en verdugo de sus propios compañeros?”