
¡Tenemos invitado especial! ¿De qué hablamos? --El pasado ya no tiene peso en nuestra vida, el futuro está en manos de Dios así que nuestro corazón puede estar tranquilo y confiado sin ansiedad, enfoquémonos en el presente, en vivir hoy, en amar hoy, en perdonar hoy, en abrazar lo que Dios ha dicho de mí hoy.