
"¿Perdonar? Si fui yo el ofendido"
Muchas veces pensamos que no tenemos que perdonar a nadie, que somos la víctima, pero Dios nos dio su perdón para que también lo podamos dar a los demás.
¿Y qué pasa cuando somos nosotros los victimarios?
Perdonar y pedir perdón, ambos son necesarios para encontrar verdadera sanidad.